Cuatro internos que se habían fugado de la Unidad de Detención N°12 de Neuquén fueron recapturados este martes tras una intensa búsqueda policial que incluyó operativos en Senillosa y Neuquén capital. La fuga, ocurrida la noche del lunes, se realizó a través de un boquete en el techo de una celda, lo que permitió a los detenidos evadir la vigilancia y escapar de la prisión.

Los prófugos, identificados como Diego Ezequiel Bastías, Josué Jeremías Fresco, Lucas Nicolás Cruces y Rogelio Rojas Cisterna, cuentan con antecedentes de evasión y delitos graves, como tentativa de femicidio y robos agravados. La Policía de Neuquén desplegó controles dinámicos y coordinó acciones con varias comisarías, logrando interceptar a los fugitivos en dos operativos distintos. Dos de ellos fueron detenidos en Senillosa tras intentar huir a pie, mientras que los otros dos fueron capturados en el barrio Gran Neuquén luego de una persecución vehicular que terminó en un choque contra un montículo de tierra.

El vehículo utilizado en la fuga, un Volkswagen Virtus gris, fue robado en octubre a un comisario mayor retirado y había permanecido oculto hasta el día de la evasión. Las autoridades investigan si los internos recibieron ayuda interna o externa para concretar la fuga y para la movilidad posterior. El auto permanece bajo resguardo judicial a la espera de peritajes.

Durante el operativo, solo se registró un policía herido en el brazo durante el forcejeo con uno de los detenidos. Los recapturados fueron trasladados a dependencias policiales y luego a la Unidad de Detención 11, por orden de la jueza de Ejecución de Neuquén, Raquel Gass.

El comisario mayor Gustavo Pizarro destacó la labor del personal policial y la importancia de los controles dinámicos en la rápida resolución del caso. "Quiero felicitar al personal policial porque gracias al trabajo de ellos esto pudo terminar de la mejor manera", expresó. La investigación continúa para esclarecer las circunstancias de la fuga y determinar posibles responsabilidades o complicidades.

El caso ha generado preocupación en la comunidad por la peligrosidad de los evadidos y la efectividad de los controles penitenciarios, mientras las autoridades buscan reforzar las medidas de seguridad y esclarecer los hechos para evitar futuras evasiones.