En la madrugada del sábado, la ciudad de Tartagal fue escenario de un violento ataque armado que dejó dos personas heridas. El hecho ocurrió en barrio Norte Grande, cuando un automóvil con cuatro jóvenes fue interceptado por otro vehículo, desde el cual se efectuaron al menos nueve disparos de arma de fuego. El ataque se produjo cerca de las 6:00 de la mañana, a la salida de un local bailable y tras desviarse por calle Jujuy, detrás de un supermercado.

Según relataron familiares de las víctimas, el grupo había conocido a dos jóvenes mujeres en el boliche y se dirigía a sus domicilios cuando fueron sorprendidos por el agresor. El conductor del auto, un joven de 22 años que había tomado el volante debido al estado de ebriedad del propietario, recibió un disparo en la pierna derecha. Una de las pasajeras sufrió tres impactos de bala en una pierna y debió ser intervenida quirúrgicamente. El propietario del vehículo logró conducir a los heridos hasta el hospital local, donde ambos fueron asistidos y se encuentran fuera de peligro.

La inspección ocular realizada por la policía constató que el Toyota Corolla presentaba al menos nueve impactos de bala, la mayoría dirigidos a los ocupantes delanteros. El agresor huyó del lugar y, hasta el momento, no ha sido identificado. La Fiscalía Penal de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas de Tartagal, a cargo de Gonzalo Ariel Vega, abrió una investigación penal y dispuso la intervención de la Unidad de Investigación UGAP para esclarecer el hecho y dar con el responsable.

El móvil del ataque permanece bajo investigación, aunque se especula sobre posibles vínculos con ajustes de cuentas o narcotráfico, sin confirmación oficial. Vecinos y familiares de las víctimas manifestaron su preocupación por el aumento de episodios violentos en la ciudad, señalando que "no ocurrían antes estos hechos". Las autoridades continúan revisando cámaras de seguridad y recolectando testimonios para avanzar en la causa.

Este episodio se suma a otros hechos violentos recientes en Tartagal, generando alarma en la comunidad y renovando el debate sobre la seguridad en la región. La investigación sigue en curso y se espera que en los próximos días se logren avances para identificar y detener al agresor.