El Gobierno nacional anunció la extensión del Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) a todo el upstream de petróleo y gas, una medida que busca potenciar la inversión y la producción en el sector energético, especialmente en la formación de Vaca Muerta. El anuncio fue realizado por el secretario de Energía y Minería, Daniel González, durante el tradicional almuerzo por el Día Nacional del Petróleo, organizado por el Instituto Argentino del Petróleo y el Gas (IAPG).

Hasta ahora, el RIGI solo contemplaba proyectos vinculados al gas natural licuado para exportación. Sin embargo, la nueva decisión, tomada recientemente tras una reunión con el ministro de Economía, Luis Caputo, y a pedido del gobernador de Neuquén, Rolando Figueroa, amplía el alcance del régimen a toda la cadena de exploración y producción (upstream) de petróleo y gas. "Esto es algo que se decidió ayer a las 18, así que todavía tenemos que sentarnos a trabajarlo", explicó González, quien adelantó que se establecerán parámetros como la producción incremental y un monto mínimo de inversión, en línea con el esquema actual de USD 200 millones.

El funcionario destacó que la ampliación del RIGI representa "un cambio de paradigma sumamente importante" y subrayó la llegada de nuevos inversores internacionales, como la reciente adquisición de activos por parte de la estadounidense Continental Resources. "Fomentar competencia resulta en mejores productos y servicios a menores precios", afirmó González, quien también remarcó que Vaca Muerta demandará entre 20 y 30 mil millones de dólares anuales en inversiones.

Por su parte, el presidente del IAPG, Ernesto López Anadón, señaló que alcanzar el objetivo de 1,5 millones de barriles diarios será un desafío y requerirá la incorporación de al menos 1.000 pozos por año, lo que demanda financiamiento y condiciones macroeconómicas estables. En este sentido, el Gobierno también anunció la intención de eliminar las retenciones a las exportaciones de petróleo convencional para apoyar a las cuencas maduras.

El gobernador Figueroa, impulsor de la medida, sostuvo que la inclusión del upstream en el RIGI permitirá acelerar la llegada de capital, incrementar la producción exportable y contribuir al superávit de la balanza energética. "El desarrollo de petróleo y gas natural, y en especial el no convencional, constituye el principal motor económico de la República Argentina", afirmó.

El Gobierno enfatizó que el equilibrio fiscal "no se negocia" y que el rol del Estado será generar condiciones para el desarrollo privado, no invertir directamente. La medida es vista por el sector como una herramienta poderosa para atraer inversiones y consolidar el crecimiento energético del país.