La contundente derrota de La Libertad Avanza (LLA) en las elecciones bonaerenses del 7 de septiembre de 2025 ha desencadenado una crisis interna sin precedentes en el oficialismo. Con una diferencia de más de 13 puntos a favor del peronismo, la jornada electoral dejó al descubierto profundas divisiones y pases de factura entre los principales referentes del espacio libertario.

Daniel "Gordo Dan" Parisini, uno de los principales propagandistas digitales de LLA, fue el primero en reaccionar públicamente. A través de sus redes sociales, Parisini reclamó al presidente Javier Milei que "ordene el equipo" y advirtió: "Acá seguiremos bancando HASTA EL FINAL. Pero ordene YA el equipo". El mensaje, dirigido directamente a Milei, fue interpretado como un llamado urgente a realizar cambios en la conducción política tras el revés electoral.

Las críticas de Parisini no se limitaron al presidente. El influencer apuntó contra Sebastián Pareja y Ramón "Nene" Vera, responsables del armado de listas en la provincia de Buenos Aires, y los responsabilizó por la marginación de jóvenes militantes y la falta de representatividad en las candidaturas. "Esto no se puede permitir nunca más", sentenció Parisini, en referencia a la interna que enfrenta a los sectores liderados por Karina Milei y los Menem con el ala digital vinculada a Santiago Caputo.

El clima de tensión se vio agravado por el reciente escándalo protagonizado por el propio Parisini, quien días antes de la elección fue repudiado por un tuit ofensivo contra el senador Luis Juez y su hija con discapacidad. El episodio generó un repudio generalizado y obligó a intervenciones públicas de funcionarios como Karina Milei y Guillermo Francos.

En paralelo, otros referentes oficialistas y periodistas afines, como Mariano Pérez y Luis Majul, sumaron críticas a la estrategia electoral y pidieron autocrítica. El asesor Santiago Caputo, antes relegado, reapareció junto a Milei en el búnker de Gonnet, buscando recuperar protagonismo y planteando la necesidad de cambios profundos en la conducción política.

La derrota electoral y la crisis interna se producen en un contexto de cuestionamientos a la gestión económica y a la relación del gobierno con sectores vulnerables. A semanas de las elecciones nacionales de octubre, el futuro de la conducción de LLA y la capacidad de Milei para recomponer su espacio político quedan en el centro del debate.