Rodrigo de Loredo, exdiputado nacional y referente de la Unión Cívica Radical (UCR) en Córdoba, oficializó su candidatura a gobernador para 2027 en un multitudinario almuerzo de fin de año realizado en su residencia de la zona sur de la capital provincial. El evento, que reunió a más de 200 dirigentes, entre intendentes, legisladores y referentes territoriales, funcionó como una clara demostración de fuerza y alineamiento interno en el radicalismo cordobés.

Durante la jornada, De Loredo recibió el respaldo explícito de los principales actores de su espacio, quienes destacaron la importancia de fortalecer la estructura partidaria y el trabajo territorial de cara a las próximas elecciones. “En 2026 debemos decirle a los cordobeses cómo les vamos a bajar los impuestos, cómo vamos a disminuir la burocracia, cómo vamos a recuperar la educación, cómo vamos a enfrentar la inseguridad y cómo vamos a garantizar que no haya ni un solo chico en Córdoba sin su plato de comida todos los días”, afirmó De Loredo en su discurso de cierre.

El encuentro, que combinó actividades sociales como karaoke y comidas típicas, también dejó en evidencia las tensiones internas del partido. Las ausencias de figuras como Ramón Mestre y Dante Rossi, ambos críticos de la actual conducción, reflejaron la persistencia de divisiones en la UCR local. Mestre y Bee Sellares, actual vicepresidente de la UCR Nacional, insisten en la necesidad de anticipar las internas partidarias y ampliar la base de discusión dentro del radicalismo cordobés.

Por su parte, Marcos Ferrer, presidente de la UCR Córdoba, ratificó el acompañamiento a De Loredo y no descartó la posibilidad de futuras alianzas, siempre que se respeten los principios programáticos del partido. El respaldo de los intendentes fue señalado como un pilar fundamental para la estrategia electoral de De Loredo, quien planea iniciar una recorrida provincial en febrero de 2026.

El radicalismo cordobés, en pleno proceso de reordenamiento tras la reciente reestructuración nacional, enfrenta el desafío de consolidar la unidad interna y fortalecer su rol opositor frente al peronismo provincial. La carrera hacia 2027 ya está en marcha, con De Loredo como principal figura, pero con una interna que promete ser intensa y determinante para el futuro del partido.