Una grave denuncia por estafa sacudió a la ciudad de Eldorado, Misiones, luego de que Romina Enríquez, madre de una alumna y tesorera designada por los padres, fuera acusada de apropiarse de cerca de 17 millones de pesos recaudados para la fiesta de egresados de la Escuela Comercio N° 19. El dinero, reunido a lo largo del año mediante rifas y transferencias, debía cubrir los gastos del evento para 35 estudiantes.

La situación se tornó crítica el día de la fiesta, cuando los responsables del salón informaron a los padres que los servicios no habían sido abonados, lo que llevó a la cancelación del evento. Ante la presión, Enríquez admitió en un chat haber gastado el dinero en el casino, aunque algunos padres, como Mónica Biczyk, desmintieron esta versión y sostuvieron que se trató de un robo directo. "Es mentira que ella tenga problemas con el juego. Eso es todo un invento al verse arrinconada por el resto de los padres", afirmó Biczyk.

La denuncia penal fue radicada por estafa, aunque la causa podría incluir cargos de administración fraudulenta o apropiación indebida, con penas de uno a seis años de prisión. Enríquez, que se desempeña como enfermera, presentó un certificado médico para evitar la prisión preventiva y designó abogado defensor.

Pese al escándalo, la comunidad se movilizó rápidamente. El intendente de Eldorado actuó como garante ante el salón, permitiendo que la fiesta se realizara tras el compromiso de pago de los padres, quienes ahora deben afrontar una nueva deuda. Además, el vicegobernador Lucas Romero Spinelli impulsó una colecta solidaria para cubrir el monto restante y se comprometió a aportar fondos si fuera necesario.

El caso puso en evidencia la necesidad de mayor control en la administración de fondos escolares y generó un debate sobre la confianza en los padres organizadores. La investigación judicial continúa, mientras la comunidad busca cerrar el capítulo con solidaridad y apoyo a los estudiantes afectados.