La desaparición de Mikaila Romero Díaz, una preadolescente de 12 años residente en el barrio Zepa de la ciudad de Córdoba, movilizó rápidamente a las autoridades judiciales y a la comunidad local. La Fiscalía de Instrucción del Distrito III Turno 1 emitió un llamado urgente solicitando la colaboración ciudadana para dar con el paradero de la menor, difundiendo una descripción detallada de sus características físicas y la vestimenta que llevaba al momento de su desaparición.

Según informaron los medios locales, Mikaila mide aproximadamente 1,63 metros, tiene tez morocha, cabello negro con flequillo hacia un costado y ojos marrones. Al momento de salir de su domicilio vestía una remera manga corta negra, short de jean claro con brillos y zapatillas blancas. La Fiscalía habilitó canales oficiales para recibir información relevante, incluyendo la Unidad Judicial 12 ubicada en barrio Patricios y el teléfono 351-5642877.

La respuesta de la comunidad fue inmediata, con vecinos y testigos colaborando activamente en la búsqueda. Gracias a la rápida intervención y la difusión de datos precisos, la menor fue localizada sana y salva. La Fiscalía agradeció públicamente la colaboración recibida, destacando que "la intervención ciudadana resulta crucial en los primeros momentos de búsqueda".

Este caso pone de manifiesto la importancia de los protocolos de búsqueda rápida implementados en Córdoba y la necesidad de mantener canales de comunicación efectivos entre la justicia y la sociedad. La coordinación entre autoridades y vecinos permitió resolver favorablemente una situación que generó gran preocupación en la ciudad. La experiencia refuerza la relevancia de la alerta temprana y la difusión de información precisa para garantizar la seguridad de los menores y la tranquilidad de sus familias.