El bloque Provincias Unidas, conformado por seis gobernadores de distintas fuerzas políticas, lanzó su agenda nacional con la presentación de diez principios políticos y una estrategia para consolidarse como alternativa de poder de cara a 2027. El grupo, integrado por los mandatarios de Córdoba, Santa Fe, Corrientes, Chubut, Jujuy y Santa Cruz, realizó su lanzamiento nacional en Río Cuarto, Córdoba, y anticipó una serie de actividades conjuntas y una gira nacional para fortalecer su presencia en el escenario político.

Entre los puntos centrales de su plataforma, Provincias Unidas destacó la consigna "votos, no vetos", en referencia a la necesidad de consensos parlamentarios para avanzar en reformas educativas, laborales, impositivas y previsionales. El bloque se posiciona como una alternativa tanto al modelo libertario del actual Gobierno nacional como al kirchnerismo, y busca blindar la ley que distribuye automáticamente los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) entre las provincias, rechazando la discrecionalidad en el manejo de estos fondos.

El contexto político está marcado por la reciente derrota electoral del oficialismo en la provincia de Buenos Aires y la creciente tensión entre la Casa Rosada y los gobernadores. En este marco, el Gobierno nacional liberó ATN por $12.500 millones a varias provincias, lo que fue interpretado por algunos sectores como un intento de dividir el bloque de gobernadores. Sin embargo, desde Provincias Unidas insisten en que su construcción política trasciende la negociación coyuntural de fondos y que su objetivo es consolidar una alternativa nacional.

En el Congreso, tanto la Cámara de Diputados como el Senado se preparan para tratar el rechazo a los vetos presidenciales sobre la ley de ATN, el financiamiento universitario y la emergencia pediátrica. Los gobernadores de Provincias Unidas anticiparon que sus legisladores votarán contra los vetos del presidente Javier Milei, en línea con su postura de fortalecer el federalismo y la transparencia en la distribución de recursos.

La estrategia del Gobierno nacional ha incluido reuniones con varios gobernadores para intentar recomponer relaciones y evitar nuevas derrotas legislativas. No obstante, persiste la desconfianza en las provincias tras meses de desencuentros y promesas incumplidas. Analistas políticos consideran que Provincias Unidas representa una construcción política alternativa que desafía el centralismo y busca instalarse como opción de poder para las próximas elecciones presidenciales.