El suministro de agua en Puerto Madryn, Chubut, fue interrumpido este lunes debido a la rotura de un bypass en el viejo acueducto que abastece a la ciudad. El incidente se produjo al intentar restablecer el servicio tras tareas de mantenimiento estacional, adelantadas por la gerencia de Agua y Saneamiento de Servicoop ante el elevado consumo registrado en los últimos días, inusual para la época.

Pablo Timinieri, gerente de Servicoop, explicó que la rotura ocurrió en la conexión que une los dos acueductos paralelos, el inaugurado en 1971 y el más reciente, habilitado en 2007. "La demanda fue tan elevada que las cisternas llegaron a niveles de riesgo y tuvimos que volver a cortar el suministro", detalló Timinieri. Durante toda la noche, cuadrillas trabajaron en la reparación del bypass, que finalizó con éxito en horas de la mañana.

Actualmente, se está llenando el viejo acueducto para habilitarlo nuevamente. El proceso requiere aproximadamente 5.700 metros cúbicos de agua en la cisterna, y una vez alcanzado ese nivel, comenzará el llenado de los centros de distribución para normalizar el servicio en los distintos barrios de Puerto Madryn. Se estima que el restablecimiento del suministro se completaría en horas de la tarde, aunque se solicita a los vecinos hacer un uso responsable del agua mientras se estabiliza el sistema.

El alto consumo de agua en la ciudad, que supera ampliamente los estándares internacionales, es motivo de preocupación para las autoridades. "Cada habitante por día consume 380 litros de agua, muy por encima de los 250 litros recomendados internacionalmente", señaló Timinieri, quien advirtió que si no se concretan las obras necesarias, Puerto Madryn podría enfrentar cortes programados durante todo el año. "Es una alerta para que vengan las obras que necesita Puerto Madryn", enfatizó.

La situación pone de manifiesto la necesidad de reeducar a la población sobre el uso racional del agua y de segmentar los riegos innecesarios. Las autoridades locales instan a la comunidad a extremar el cuidado del recurso y a utilizarlo solo para actividades vitales mientras dure la interrupción del servicio. El episodio evidencia los desafíos que enfrenta la ciudad en materia de infraestructura y sostenibilidad del abastecimiento de agua potable, especialmente ante el crecimiento poblacional y el aumento de la demanda.