La coalición de centro "Somos Buenos Aires" se consolida como una alternativa política en la provincia de Buenos Aires, en medio de la polarización entre libertarios y peronistas de cara a las elecciones legislativas del 7 de septiembre. El frente, integrado por la Unión Cívica Radical, peronistas no kirchneristas, la Coalición Cívica, el GEN, el Socialismo y partidos vecinalistas, busca captar el voto de los electores desencantados con los extremos políticos.

En una votación realizada por la Convención de la UCR bonaerense, nueve de sus diez miembros ratificaron la pertenencia al frente, aunque persisten tensiones internas, especialmente con el sector liderado por el senador Maximiliano Abad, que se abstuvo y cuestiona la legitimidad del acuerdo. "Estamos enfocados en construir una alternativa competitiva en los 135 distritos de la Provincia de Buenos Aires", afirmó Pablo Domenichini, titular de la Convención, quien convocó a todos los radicales a sumarse al armado.

El proceso de definición de listas y candidaturas se desarrolla en un clima de negociaciones intensas y urgencia, con el plazo máximo para la presentación de nóminas este sábado. La territorialidad de los intendentes y referentes locales es clave en la selección de candidatos, con figuras como Julio Zamora, Emilio Monzó, Florencio Randazzo y Juan Schiaretti entre los nombres más destacados. La Junta Electoral bonaerense reconoció formalmente la coalición, que incluye una amplia constelación de partidos y agrupaciones.

Las encuestas muestran que La Libertad Avanza y Fuerza Patria concentran el 80% de las preferencias, lo que representa un desafío para la "tercera vía" de captar votos disponibles. Dirigentes de "Somos Buenos Aires" expresan optimismo sobre la posibilidad de dar la sorpresa, aunque reconocen la dificultad de conjugar egos y pretensiones en un armado frágil e inestable. El sector de Abad, por su parte, advierte que la coalición "no es competitiva" y la califica como "rejunte peronista".

En este contexto, la coalición apuesta a sorprender en los comicios, pero enfrenta el desafío de evitar fugas y rupturas internas, mientras los intendentes y referentes locales tienen protagonismo en la definición de candidaturas, buscando equilibrio entre gestión y representatividad. El cierre de listas se realiza en un clima de tensión y urgencia, con negociaciones que se intensifican a medida que se acerca la fecha límite.