En la provincia de Buenos Aires, el peronismo enfrenta una etapa decisiva en la definición de sus candidatos para las próximas elecciones nacionales y provinciales. A pocos días del cierre de listas, la incertidumbre sobre quién encabezará la boleta de diputados nacionales se mantiene, con Máximo Kirchner, Sergio Massa y Juan Grabois como los principales nombres en disputa. La expresidenta Cristina Kirchner, quien cumple prisión domiciliaria, conserva la última palabra en la selección de los candidatos más relevantes, especialmente en el principal distrito electoral del país.

El proceso de armado de listas ha estado marcado por tensiones internas y negociaciones entre los distintos sectores del peronismo bonaerense. Mientras algunos intendentes y referentes kirchneristas impulsan la candidatura de Máximo Kirchner, otros, como Diego Nanni, intendente de Exaltación de la Cruz, expresan su preferencia por figuras con mayor experiencia ejecutiva y cercanía con la gestión diaria. "No sería lo que yo apoye, me gusta el candidato ejecutivo, con experiencia, que tenga sensibilidad, roce con la gente", afirmó Nanni en declaraciones radiales.

La campaña electoral se desarrolla en un contexto de desorden y preocupación por la baja participación, agravada por la superposición de elecciones provinciales y nacionales y la implementación de distintos sistemas de votación. Las encuestas reflejan una paridad entre el peronismo y La Libertad Avanza, con diferencias mínimas en la intención de voto y una imagen dividida de los principales dirigentes, como Javier Milei y Axel Kicillof.

En el Partido Justicialista bonaerense, Máximo Kirchner prepara la convocatoria a elecciones internas para renovar autoridades, en un intento por dirimir las diferencias que persisten tras el cierre de listas. "No le tememos a una interna. Fuimos a una paso en Lanús, en Quilmes, en Hurlingham y las ganamos", aseguran desde La Cámpora, aunque reconocen que la negociación ha sido compleja y que no hay garantías de armonía tras los comicios.

Analistas políticos advierten que el apellido Kirchner no necesariamente suma votos y que podría generar rechazo en ciertos sectores del electorado. "La base la tienen todos, el asunto es quién puede crecer", señala Analía del Franco, quien destaca la necesidad de un candidato con mayor imagen positiva que negativa. Por su parte, Kicillof ha solicitado que el reparto de lugares en la lista contemple a todos los sectores de Fuerza Patria, priorizando la inclusión de intendentes, gremios y referentes territoriales.

El desenlace de las negociaciones y la definición de los candidatos será clave para el futuro del peronismo bonaerense, que busca llegar ordenado a los comicios de septiembre y octubre, en medio de un escenario de alta polarización y demandas sociales por seguridad, salarios e inflación.