La confirmación de la condena a seis años de prisión y la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos de Cristina Kirchner ha generado un sismo en la política argentina. Desde el martes, la expresidenta cumple prisión domiciliaria en su departamento de Constitución, en el marco de la causa Vialidad, mientras el peronismo y el oficialismo ajustan sus estrategias de cara a las próximas elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires.

En un mensaje grabado dirigido a la militancia que se movilizó a Plaza de Mayo y frente a su domicilio, Cristina Kirchner denunció: “No me dejan competir porque saben que pierden”, y vinculó su situación a una supuesta persecución del “poder económico concentrado”. La movilización, convocada por el Partido Justicialista, fue minimizada por el Gobierno, que estimó la asistencia en 48.000 personas, lejos del millón que mencionaron algunos dirigentes peronistas. La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, subrayó la tranquilidad de la marcha y acusó a la exmandataria de victimizarse.

El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, aseguró que la inhabilitación de Cristina Kirchner no alterará la estrategia electoral del oficialismo en la provincia de Buenos Aires. “Tal vez se lleve una sorpresa en octubre”, afirmó, y sostuvo que el peronismo deberá redefinir su liderazgo y candidaturas en un contexto de fuerte interna. Por su parte, La Libertad Avanza y el PRO continúan negociando acuerdos para consolidar su presencia en el distrito bonaerense.

Analistas políticos y funcionarios del Gobierno consideran que la salida de Cristina Kirchner de la contienda electoral abre una ventana de oportunidad para el oficialismo, aunque advierten sobre la volatilidad del escenario y la posibilidad de un recambio generacional en el peronismo. Mientras tanto, la expresidenta enfrenta otros procesos judiciales, como la causa Hotesur-Los Sauces, y el peronismo busca recomponer su unidad en medio de una de sus mayores crisis de liderazgo.

El desenlace de esta coyuntura marcará el rumbo de la política argentina en los próximos meses, con la mirada puesta en las elecciones legislativas y en la capacidad de los distintos espacios para adaptarse a un escenario inédito.