Un violento episodio familiar conmocionó a la ciudad de San Miguel de Tucumán en la madrugada del sábado, cuando un hombre de 62 años asesinó a su suegra de 104 años tras una discusión con su esposa. El hecho ocurrió en una vivienda ubicada en el pasaje Agustín Maza al 500, en la zona oeste de la capital tucumana.

Según informaron fuentes policiales y judiciales, Hugo Zelaya inició una disputa con su esposa, Estela Medina, que rápidamente escaló a la violencia física. Medina logró escapar momentáneamente del ataque, pero su madre, Rosa Andrada, intervino para defenderla. Zelaya la agredió brutalmente, propinándole golpes de puño y utilizando un bastón, lo que provocó la muerte inmediata de la anciana.

Un vecino, alertado por los gritos provenientes de la vivienda, llamó a la policía. Al llegar, los oficiales de la Comisaría 3ra. detuvieron a Zelaya en el lugar y hallaron el cuerpo sin vida de Andrada. Estela Medina fue trasladada al Hospital Padilla, donde permanece internada fuera de peligro.

El fiscal Carlos Sale, a cargo de la Unidad Fiscal de Homicidios II, dispuso la realización de peritajes en la escena y aguarda los resultados de la autopsia para avanzar en la imputación formal del detenido, quien enfrenta cargos de homicidio agravado y tentativa de homicidio.

Este crimen se produce en un contexto de creciente preocupación por la violencia de género en Argentina. Según el Observatorio “Ahora Que Sí Nos Ven”, en el primer cuatrimestre de 2025 se registraron 94 femicidios en el país, cifra superior a la del año anterior. El caso de Rosa Andrada pone de relieve la vulnerabilidad de las mujeres mayores y la urgencia de reforzar las políticas de prevención y protección frente a la violencia intrafamiliar.

Las autoridades continúan investigando el hecho, mientras organizaciones sociales y de derechos humanos insisten en la necesidad de abordar integralmente la problemática de la violencia de género, que afecta a mujeres de todas las edades y contextos.