La provincia de San Juan atravesó una semana marcada por intensas tormentas y alertas meteorológicas, según reportes del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) y medios locales. Desde el sábado 6 de diciembre, distintos puntos de la provincia, especialmente los departamentos del este y zonas alejadas, fueron afectados por lluvias intensas, ráfagas de viento de hasta 80 km/h y la posibilidad de caída de granizo.

El SMN emitió una alerta amarilla vigente desde la madrugada del jueves 11 hasta la madrugada del viernes 12, advirtiendo sobre tormentas de variada intensidad. Se estimaron precipitaciones acumuladas entre 20 y 50 milímetros, con la posibilidad de superar estos valores en sectores puntuales. Las autoridades recomendaron a la población tomar precauciones, especialmente en rutas como la RN 150, donde se registraron lluvias intensas y riesgo de desprendimiento de rocas y crecidas repentinas.

A pesar de la severidad de las condiciones climáticas, hasta la madrugada del domingo no se reportaron evacuados, según fuentes oficiales. El pronóstico para el viernes 12 indica una mejora significativa: se espera un día caluroso, con cielo despejado y temperaturas máximas que podrían alcanzar los 35°C, sin alertas vigentes.

El fenómeno climático se enmarca en la temporada estival, caracterizada por eventos meteorológicos severos en la región de Cuyo. Las autoridades y medios locales instaron a la población a mantenerse informada a través de los canales oficiales y a extremar las precauciones durante los episodios de tormenta. Se prevé que, tras la mejora del viernes, el clima se mantenga estable y caluroso en los días siguientes, permitiendo la reanudación de las actividades habituales en la provincia.