Un adolescente de 17 años falleció tras enfermarse durante su viaje de egresados en Bariloche, en octubre de 2022, y la Justicia de Río Negro imputó a cuatro personas por su muerte. Thomas Octavio comenzó a presentar síntomas de fiebre y malestar general el 19 de octubre, mientras se alojaba en el Hotel Club House junto a sus compañeros de colegio. A pesar de su deterioro, solo recibió atención en la enfermería del hotel y nunca fue derivado a un centro médico ni atendido por un profesional matriculado.

Según la investigación, uno de los imputados ejercía como médico sin estar habilitado en Bariloche. Los coordinadores de la empresa de turismo estudiantil Traveldance, responsables del grupo, permitieron que Thomas regresara a Buenos Aires en micro, un viaje de 21 horas, sin supervisión médica y bajo el cuidado de otros estudiantes. Al llegar a su casa, el joven presentaba fiebre alta, vómitos y dificultad para respirar.

El 24 de octubre fue atendido en la Unidad Sanitaria de Valentín Alsina por la médica Ana Clara Carlín, quien, según la pericia forense, subestimó el cuadro clínico y no ordenó estudios básicos. Horas más tarde, su madre lo llevó al Sanatorio Santa Bárbara, donde se descompensó y fue internado de urgencia. Thomas falleció el 25 de octubre a las 21.50 por una falla multiorgánica provocada por una infección de Streptococcus pyogenes, una bacteria que, de haber sido tratada a tiempo, podría no haber resultado fatal.

La pericia médica determinó que existió una ventana de oportunidad entre el 21 y el 24 de octubre para detectar y tratar la infección. La fiscalía imputó a los coordinadores Santiago Castaño y Diego Cañete, a la médica Ana Clara Carlín y al supuesto médico Néstor Ocampo por homicidio culposo, al considerar que actuaron con negligencia y omitieron el deber de cuidado. Las defensas de los imputados niegan responsabilidad o plantean otras teorías del caso, mientras la investigación penal continúa bajo la supervisión del Ministerio Público Fiscal de Río Negro. El caso ha puesto en evidencia las falencias en la atención médica durante los viajes estudiantiles y la necesidad de mayores controles en la contratación de personal médico.