Marina Jiménez, reconocida bailarina y directora del Ballet Salta, fue condenada a diez años de prisión por abuso sexual agravado contra su nieto, en un fallo que sacudió al ámbito cultural argentino. La sentencia, dictada por un tribunal de Buenos Aires, establece que los abusos ocurrieron desde que la víctima tenía 10 años y se extendieron durante siete años, tanto en la ciudad de Salta como en vacaciones familiares en Mar del Plata.

La denuncia fue presentada en 2022 por Emanuel Jiménez, quien relató que los hechos se produjeron bajo amenazas y en reiteradas ocasiones, lo que le generó un profundo sufrimiento y dificultades para hablar del tema durante años. "Es muy doloroso, me costó mucho poder hablarlo. Sentí mucha vergüenza por mucho tiempo", declaró la víctima, quien hoy tiene 31 años. El proceso judicial incluyó pericias interdisciplinarias y testimonios de familiares y allegados, lo que permitió acreditar la responsabilidad de la acusada.

El padre de la víctima, Aníbal Jiménez, expresó tras conocerse el fallo: "Se hizo justicia". Sin embargo, la sentencia aún no está firme, por lo que Marina Jiménez permanece en libertad hasta que se resuelvan las apelaciones presentadas por su defensa, que sostiene que la denuncia es "armada" y defiende la trayectoria de la acusada en el ámbito artístico.

El Ballet Salta, institución fundada y dirigida por Jiménez desde 1970, emitió un comunicado en el que subraya el respeto por el funcionamiento de la Justicia y aclara que la directora sigue cumpliendo con las obligaciones procesales. El caso generó un fuerte impacto en la comunidad artística y reavivó el debate sobre el abuso intrafamiliar y la importancia de la denuncia y el acompañamiento a las víctimas.

Emanuel Jiménez, por su parte, llamó a otras víctimas a hablar y buscar apoyo: "Quiero dejar un mensaje claro para todos: que hablen. Es muy difícil, pero nunca es tarde para empezar a sanar". El futuro del caso dependerá de la resolución de las apelaciones y de la decisión sobre el cumplimiento efectivo o domiciliario de la condena, dada la edad de la acusada.