Un importante escape de gas se registró el miércoles 27 de agosto en el barrio porteño de Palermo, generando alarma y un amplio operativo de emergencia. El incidente ocurrió cerca de las 9:25 de la mañana, cuando una retroexcavadora que realizaba tareas de repavimentación en el Metrobús de la avenida Juan B. Justo rompió un caño maestro de media presión, provocando una fuga de gas visible y un fuerte olor que rápidamente alteró la rutina de la zona.

El estruendo y el olor a gas obligaron a vecinos y comerciantes a evacuar voluntariamente sus locales y viviendas, mientras las autoridades cortaban el tránsito vehicular y peatonal desde avenida Santa Fe hasta Paraguay. Las líneas de colectivo fueron desviadas y el tren San Martín circuló de forma limitada, evitando la zona afectada. "Se sintió como una explosión, un ruido fuerte, y al minuto ya estábamos con el olor insoportable a gas. Fue automático, empezaron a correr los vecinos y enseguida llegó la policía", relató Luis Ramírez, kiosquero de la zona.

En el lugar trabajaron Bomberos de la Ciudad, SAME, Defensa Civil, la policía y cuadrillas de Metrogas, quienes desplegaron un operativo de magnitud. Los bomberos utilizaron agua para disipar el gas y Metrogas debió trasladar prensas hidráulicas especiales desde Llavallol para obturar el caño dañado. "El agua ayuda a disipar el gas y a marcar cómo se mueve en el aire. Es una tarea preventiva fundamental mientras Metrogas trabaja en prensar el caño maestro para reducir la presión", explicó Alejandro Nicolau, vocero del SAME.

A pesar de la magnitud del incidente, no se reportaron heridos ni asistencias médicas. El shopping Los Arcos y la Clínica Los Arcos no fueron evacuados, aunque en la clínica se suspendieron cirugías y se restringió la atención por guardia. "La Ciudad quiere llevar tranquilidad, ya que se está trabajando en la zona. El escape está controlado", comunicó el Gobierno porteño.

El escape fue finalmente controlado cerca de las 16:30-16:50, cuando se logró prensar el caño y detener la fuga. Los trabajos continuaron para la reparación definitiva del caño afectado. El evento puso en evidencia la importancia de la seguridad en obras públicas y la necesidad de protocolos estrictos para evitar incidentes similares en zonas densamente pobladas.