La Cámara Penal de Rosario absolvió al policía Luciano Nocelli, quien había sido condenado a 25 años de prisión por el doble homicidio de dos asaltantes durante un intento de robo en 2019. La decisión judicial se produjo tras la anulación de la condena por parte de la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe, que consideró que la valoración de los hechos había sido arbitraria y fragmentada, sin tener en cuenta el contexto operativo y la percepción subjetiva del agente en una situación de riesgo extremo.

El hecho ocurrió la noche del 21 de mayo de 2019, cuando Nocelli y su compañero intervinieron en un asalto en la esquina de bulevar 27 de Febrero y Buenos Aires, en Rosario. Según los registros de cámaras de seguridad y testimonios, el enfrentamiento duró apenas 14 segundos y culminó con la muerte de Maximiliano Rosasco y Jimena Daiana Gramajo. La investigación judicial determinó inicialmente que Nocelli había incurrido en exceso de legítima defensa, disparando a los asaltantes por la espalda, lo que motivó su condena en primera y segunda instancia.

Sin embargo, la defensa del policía apeló la sentencia y la Corte Suprema provincial anuló el fallo, argumentando que la reconstrucción posterior de los hechos no reflejaba la tensión y el peligro real enfrentado por el agente. El tribunal ordenó un nuevo juicio, en el que los camaristas Gabriela Sansó, Juan Pablo Lavini Rosset y Alfredo Ivaldi Artacho resolvieron la absolución de Nocelli, considerando que actuó en legítima defensa.

La resolución fue celebrada por el gobernador Maximiliano Pullaro, quien destacó que "algo está cambiando en la Justicia santafesina" y agradeció el respaldo a los policías que "ponen su vida en peligro para proteger a la sociedad". La vicegobernadora Gisela Scaglia y el ministro de Justicia y Seguridad, Pablo Cococcioni, también manifestaron su apoyo, subrayando la importancia de acompañar a los agentes que actúan con coraje y vocación.

El caso Nocelli ha generado un intenso debate sobre los límites de la legítima defensa y el uso de la fuerza por parte de la policía, así como sobre el respaldo institucional a los efectivos en situaciones de riesgo. La absolución podría sentar precedentes en la interpretación judicial de la actuación policial bajo presión y marca un punto de inflexión en la relación entre el Poder Judicial y las fuerzas de seguridad en la provincia de Santa Fe.