El matrimonio conformado por Esteban Enrique Rocha y Brisa Milagros Ferreyra Leguizamón arribó este lunes a Rosario, Argentina, tras ser extraditados desde Asunción, Paraguay. Ambos son requeridos por el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N° 1 de Rosario, acusados de tráfico de estupefacientes en la modalidad de tenencia con fines de comercialización, distribución y almacenamiento. La pareja, conocida mediáticamente por la "boda narco" celebrada en Ibarlucea en enero de 2022, estuvo prófuga durante casi un año luego de que, al finalizar su fiesta de casamiento, se produjera un triple crimen que conmocionó a la región.

El operativo de extradición, coordinado por el Ministerio de Seguridad Nacional en conjunto con Interpol, la Policía Federal Argentina y la Dirección General de Cooperación Internacional, incluyó un fuerte despliegue de agentes federales encapuchados y armados en el aeropuerto internacional de Rosario. "El temor a represalias y un nuevo ajuste motivó el extremo cuidado", señalaron fuentes oficiales. Rocha y Leguizamón fueron entregados a la Delegación Unidad Operativa Federal Rosario y alojados en la División Alcaidía del Área Regional Federal Litoral.

La investigación judicial sostiene que ambos integrarían la organización liderada por Olga “Tata” Medina, condenada por regentear zonas de venta de droga en Rosario y mantener vínculos con la banda de Los Monos. El triple homicidio ocurrido en la fiesta de bodas, presuntamente motivado por una deuda narco, reveló la presencia de varios personajes conectados al tráfico de drogas entre los invitados. Las víctimas, Iván Maximiliano Giménez, Erica Vanesa Romero y su hija Elena, fueron emboscadas y atacadas a balazos cuando se retiraban del evento.

Tras la fuga a Paraguay, Rocha y Leguizamón fueron detenidos en enero de 2023 en un bar de Asunción, luego de que familiares expusieran su paradero en redes sociales. El proceso de extradición se extendió durante más de dos años, hasta que finalmente fueron trasladados a Argentina para enfrentar la Justicia. Junto a ellos, dos ciudadanos paraguayos acusados de homicidio también fueron extraditados y puestos a disposición de las autoridades argentinas en Buenos Aires.

El caso ha puesto en evidencia la compleja trama de violencia narco en Rosario y la infiltración de organizaciones criminales en eventos sociales. El juicio contra la pareja podría arrojar luz sobre el funcionamiento interno de las bandas narco locales y sus disputas, en un contexto de creciente preocupación por la seguridad en la región.