La senadora y ex ministra de Seguridad Patricia Bullrich expuso ante empresarios los principales ejes de la reforma laboral impulsada por el Gobierno nacional. Durante el cierre del Seminario Propymes, Bullrich detalló que la iniciativa busca limitar la actividad sindical dentro de las empresas, estableciendo un máximo de diez horas mensuales pagas para los delegados gremiales. "El resto, a laburar", afirmó, recibiendo el respaldo de los asistentes.

La reforma también endurece las sanciones para bloqueos, tomas y cortes en plantas, considerándolos infracciones graves bajo el Código Penal. Bullrich recordó que, durante su gestión, aplicó el protocolo antibloqueos en numerosas ocasiones y defendió la necesidad de reglas claras para garantizar la estabilidad productiva.

En cuanto a las condiciones de despido, la propuesta establece un sistema de indemnización de un mes por año trabajado, calculado únicamente sobre el salario básico, excluyendo adicionales como aguinaldo o viáticos. Además, se incorpora una fórmula de actualización para litigios judiciales basada en el índice de precios al consumidor más un 3% anual, con el objetivo de brindar previsibilidad tanto a trabajadores como a empleadores.

La senadora destacó la creación del Fondo de Asistencia Laboral, financiado con el 3% de las contribuciones patronales, para cubrir pasivos como despidos o jubilaciones. También se prevén incentivos fiscales para inversiones de entre 150.000 y 30 millones de dólares, incluyendo la devolución acelerada del IVA y la reducción de aportes patronales para nuevos empleos.

Bullrich subrayó la importancia de modernizar los convenios colectivos, eliminando la ultraactividad y permitiendo acuerdos por empresa, rama o establecimiento. Asimismo, adelantó la transferencia del fuero laboral a la Ciudad de Buenos Aires, con jueces seleccionados por criterios objetivos y el respaldo de la Corte Suprema.

La reforma incluye beneficios para el blanqueo laboral, con condonación de deudas y reconocimiento previsional para trabajadores no registrados. Además, se otorgan coberturas obligatorias para los cerca de 500.000 trabajadores de plataformas digitales.

El Gobierno plantea como meta que cada empresa argentina cuente con siete sucursales en la próxima década, apostando a un crecimiento sostenido. El debate sobre la reforma se traslada ahora al Congreso, donde se anticipa una discusión intensa entre los distintos sectores políticos y gremiales.