Gabriela Arací Barrios, una joven de 20 años, fue hallada muerta en Avia Terai, Chaco, tras una intensa búsqueda que comenzó la madrugada del domingo, cuando su familia denunció su desaparición. El cuerpo de la joven fue encontrado dentro de un pozo cloacal tapado con cemento en la vivienda de Jesús Salvatierra, su pareja y principal sospechoso, ubicada en el barrio Sur de la localidad.

La investigación se activó rápidamente luego de que la madre de Gabriela, Natalia Vanesa Barrios, reportara la ausencia de su hija. Los rastrillajes policiales incluyeron el uso de drones, perros especializados y allanamientos en varias viviendas. Un primer indicio clave fue el hallazgo de la motocicleta de Gabriela completamente calcinada en una casa abandonada, lo que llevó a la detención de cinco personas: cuatro hombres y una mujer, todos vinculados a las últimas horas de la víctima.

Durante el operativo en la casa de Salvatierra, los bomberos encontraron el cuerpo de Gabriela en una bolsa de arpillera amarilla, parcialmente desnudo, dentro de un pozo cubierto por una losa de cemento. Salvatierra, de 33 años, presentaba heridas compatibles con un posible intento de defensa por parte de la víctima, según los peritos. El fiscal Marcelo Soto dispuso la imputación inmediata del detenido y ordenó la continuidad de las pericias en la vivienda, además de analizar audios que habrían registrado una discusión entre la joven y su pareja horas antes del crimen.

Los investigadores secuestraron varios elementos para peritaje científico, entre ellos cuchillos, ropa con manchas de sangre, un mantel, una motocicleta RX 150 cc y un equipo de radio portátil. El Instituto de Medicina y Ciencias Forenses trasladó el cuerpo a la morgue judicial de Sáenz Peña para realizar la autopsia y determinar las causas de la muerte.

El caso, que comenzó como una desaparición, fue recaratulado como presunto femicidio y generó una fuerte conmoción en la comunidad de Avia Terai. Familiares, vecinos y organizaciones de mujeres se movilizaron para exigir justicia y el esclarecimiento del hecho. Las autoridades investigan la posible participación o el grado de encubrimiento de los otros detenidos, mientras el caso se suma a la preocupación por la violencia de género en la región. Se espera que los resultados de la autopsia y los peritajes aporten más información sobre el crimen y sus circunstancias.