El barrio porteño de Villa Crespo fue escenario de una tragedia que ha conmocionado a la comunidad. Laura Leguizamón, de 51 años, asesinó a su esposo Adrián Seltzer y a sus dos hijos, Ian e Ivo, antes de quitarse la vida. Las investigaciones han revelado detalles escalofriantes sobre el caso.

El ataque ocurrió en el departamento ubicado en Aguirre 295, entre las 5 y las 6 de la mañana del 22 de mayo. Según las pericias, Laura comenzó por asesinar a su esposo mientras dormía. Adrián Seltzer, de 53 años, fue apuñalado tres veces en el pecho y no presentó signos de defensa, lo que indica que estaba dormido o sedado. Posteriormente, la mujer se dirigió a las habitaciones de sus hijos.

Ian e Ivo, de 15 y 12 años, intentaron defenderse y escapar, pero fueron alcanzados y asesinados. Ian fue atacado primero en su habitación, logró correr herido hasta el comedor, donde fue rematado. Ivo, por su parte, fue atacado mientras dormía en una cama cucheta y cayó al piso, donde recibió múltiples heridas. Ambos presentaban lesiones defensivas en las manos y los brazos.

Tras cometer los crímenes, Laura regresó a la habitación matrimonial, escribió una carta con frases incoherentes y se suicidó en el baño. La carta, que contenía frases como "Les arruinaba la vida" y "Los amo", fue clave para confirmar su autoría en el hecho. Las pericias caligráficas demostraron que la escritura coincidía con la de Laura.

En el lugar se encontraron dos cuchillos de cocina utilizados en el ataque, ambos con rastros papilares de la mujer. Además, se hallaron medicamentos psiquiátricos recetados para tratar cuadros psicóticos y trastornos de personalidad. Según declaraciones de su hermana, Nora Leguizamón, Laura había mostrado signos de desvarío en el último año, pero nunca se imaginó que algo así pudiera ocurrir.

El fiscal César Troncoso, a cargo de la investigación, evalúa si hubo negligencia médica en el tratamiento de Laura. La familia había buscado ayuda en el Hospital Italiano, pero el turno estaba programado para junio, lo que dejó a Laura sin atención adecuada en los meses previos al ataque.

La comunidad de Villa Crespo está conmocionada, y el caso ha reabierto el debate sobre la salud mental y su impacto en la seguridad. Este trágico evento pone en evidencia la importancia de la atención oportuna y adecuada en casos de salud mental para prevenir desenlaces fatales.

El caso sigue bajo investigación, y las autoridades buscan esclarecer todos los detalles para entender cómo se llegó a este desenlace tan trágico.