La región de Santa Fe se prepara para una semana marcada por inestabilidad climática, lluvias intensas y un brusco descenso de temperaturas debido al ingreso de un frente frío de origen polar. Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), se ha emitido una alerta amarilla por tormentas que afectará a gran parte de la provincia, con acumulados de lluvia que podrían superar los 70 mm en algunas áreas.

El lunes comenzó con cielo cubierto y lluvias débiles a moderadas, mientras que para el martes se esperan tormentas aisladas, actividad eléctrica y ráfagas de viento provenientes del sudoeste. Este cambio climático será acompañado por un descenso progresivo de las temperaturas, que se hará más evidente a partir del miércoles, cuando una masa de aire polar se instale en la región. Las temperaturas mínimas podrían caer por debajo de los 4 °C hacia el fin de semana, con posibles heladas en zonas rurales.

Meteorólogos han señalado que este frente frío marca el inicio anticipado del invierno en la región. "Esperamos un descenso significativo de las temperaturas, con mínimas que podrían llegar a los 4 °C y máximas que no superarían los 14 °C", explicó Mario Navarro, meteorólogo del Observatorio Salsipuedes. Además, se prevé que las condiciones climáticas adversas afecten no solo a la población, sino también a sectores como la producción agropecuaria y el transporte.

Ante esta situación, las autoridades han instado a la población a tomar precauciones, como evitar actividades al aire libre durante las tormentas, proteger a los animales domésticos y mantenerse informados a través de los canales oficiales. También se recomienda extremar cuidados en la vía pública, especialmente en zonas con árboles o cables eléctricos.

El impacto de este fenómeno climático no se limita a Santa Fe, ya que también afectará a otras provincias de la región pampeana y el Litoral argentino. Este evento se enmarca en un patrón climático más amplio que ha caracterizado a mayo como un mes de alta variabilidad en las condiciones meteorológicas.

En conclusión, la llegada de este frente frío representa un desafío tanto para la población como para sectores clave de la economía regional. Las autoridades y expertos subrayan la importancia de mantenerse informados y preparados para mitigar los riesgos asociados a estas condiciones extremas.