La provincia de Santa Fe intensificó su reclamo al gobierno nacional por el estado de las rutas nacionales que atraviesan su territorio. En los últimos días, el gobierno provincial instaló carteles llamativos en los accesos a las rutas 9, 33 y A012, señalando que el mantenimiento de estas vías corresponde al Estado nacional y no a la provincia. Esta medida busca dejar en claro ante la sociedad la responsabilidad sobre el estado de las rutas, en medio de una disputa creciente por fondos y competencias.

El gobernador Maximiliano Pullaro explicó que la provincia ha invertido cerca de 400 millones de dólares en la reparación de rutas provinciales, mientras que las nacionales presentan un "estado catastrófico" que, según sus palabras, provoca siniestros fatales todas las semanas. Pullaro recordó que Santa Fe incluso aportó 7.000 toneladas de asfalto para bachear tramos críticos de rutas nacionales, pero que la Nación no ha respondido a los pedidos de cesión de estas vías para que la provincia pueda hacerse cargo de su mantenimiento.

La situación se agravó tras la caída de licitaciones para obras en las rutas 33 y 178, lo que llevó al gobierno santafesino a reforzar la señalización y a recomendar a los conductores que, de ser posible, utilicen rutas provinciales, que se encuentran en mejores condiciones. Pullaro advirtió que la falta de mantenimiento "se está comiendo el activo vial" y que la circulación de 2,2 millones de camiones al año acelera el deterioro de la infraestructura.

El conflicto se da en el contexto de la disolución de Vialidad Nacional y el anuncio del gobierno de Javier Milei de privatizar parte de la red vial. Además, el Senado dio media sanción a un proyecto que busca coparticipar automáticamente los fondos de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN), lo que intensificó la disputa entre Nación y provincias. El gobierno nacional, por su parte, advirtió que vetará cualquier ley que ponga en riesgo el equilibrio fiscal.

Legisladores y funcionarios provinciales respaldaron el reclamo de Pullaro y pidieron soluciones urgentes. Mientras tanto, la provincia de Santa Fe reiteró su disposición a asumir la administración integral de las rutas nacionales si la Nación decide cederlas, presentando incluso un plan ante la Legislatura local. El desenlace de este conflicto podría tener implicancias significativas para la infraestructura vial y la distribución de fondos en todo el país.