Se filtró el boletín de Diego Fernández, el joven enterrado detrás de la casa de Cerati, y un dato fue clave
🔎 Tras 41 años, identifican los restos de Diego Fernández Lima, desaparecido en 1984 en Buenos Aires. El hallazgo reabre la investigación por homicidio y encubrimiento. Familia y comunidad reclaman justicia y verdad. #Seguridad #Justicia


El hallazgo de los restos de Diego Fernández Lima, adolescente desaparecido en 1984, ha cerrado uno de los misterios más prolongados de la historia policial argentina. El caso, que permaneció sin resolver durante 41 años, se reactivó en mayo de 2025 cuando obreros que trabajaban en una obra en el barrio de Coghlan, Buenos Aires, encontraron huesos humanos en el terreno donde alguna vez vivió el músico Gustavo Cerati. La noticia atrajo la atención pública y permitió que la familia de Fernández Lima, que nunca dejó de buscarlo, se pusiera en contacto con la fiscalía.
La identificación de los restos fue posible gracias al trabajo del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), que realizó análisis genéticos y arqueológicos. Junto al cuerpo se hallaron objetos personales como un reloj calculadora y una corbata escolar, que ayudaron a establecer la identidad. La madre de Diego, Bernabella Lima, accedió a realizarse una prueba de ADN que resultó concluyente. "Es una noticia triste, sin duda, pero es una certeza para la familia. Diego no pudo volver a su casa, pasó algo en el medio", expresó Mariela Fumagalli, directora del EAAF.
La investigación judicial, a cargo del fiscal Martín López Perrando, apunta a un homicidio y posible encubrimiento familiar. El principal sospechoso es Cristian Graf, excompañero de colegio de la víctima, quien vivía en la casa donde se hallaron los restos. Testimonios de exalumnos y registros escolares están siendo analizados para reconstruir el vínculo entre ambos y determinar si la familia Graf tenía conocimiento del crimen. "Estamos cerca de una prueba importante, un elemento clave que nos va a permitir saber si toda la familia Graf sabía lo que había en el fondo de la casa", señalaron fuentes judiciales.
El caso estuvo archivado durante décadas como "fuga de hogar", lo que dificultó la búsqueda y el acceso a la justicia por parte de la familia. El padre de Diego, Juan Benigno Fernández, llevó una bitácora de la búsqueda hasta su muerte en 1991, mientras la madre continuó la tarea durante años. La familia sufrió graves consecuencias emocionales y personales, manteniendo la esperanza de encontrar respuestas.
El club Excursionistas, donde Diego jugaba al fútbol, realizó un homenaje en su memoria, reflejando el impacto del caso en la comunidad. La resolución del misterio ha generado debate sobre la respuesta institucional ante desapariciones en democracia y la necesidad de justicia para las víctimas y sus familias. Aunque el crimen estaría prescripto penalmente, la familia reclama verdad y justicia para cerrar una etapa de dolor e incertidumbre.
Entidades Mencionadas
Artículos Relacionados

La UIF detectó la filtración de un reporte secreto por sospecha de lavado y radicó una denuncia penal
14 de agosto de 2025

Video impactante: cuatro motochorros mataron a una joven e hirieron a su hermana en un intento de robo en Laferrere
14 de agosto de 2025

Morir desnudo y maniatado: el ataque fatal de Iara Grisel, la viuda negra de Flores
13 de agosto de 2025
Fuentes
Análisis de Fuentes
Comparación entre las fuentes de información utilizadas para este análisis en diferentes dimensiones.