El Papa León XIV aprobó la beatificación de Enrique Shaw, empresario argentino y fundador de la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa (ACDE), tras reconocer un milagro atribuido a su intercesión. Shaw, nacido en París en 1921 y fallecido en Buenos Aires en 1962, es recordado por su gestión al frente de Cristalerías Rigolleau y Pinamar S.A., así como por su compromiso con la ética empresarial y la justicia social.

El milagro que permitió su beatificación fue la curación inexplicable de un niño de seis años, gravemente herido tras un accidente con un caballo. Según fuentes eclesiásticas, la recuperación del menor no pudo ser explicada por la ciencia médica y fue atribuida a la intercesión de Shaw, a quien la familia del niño rezó fervientemente. El anuncio del Vaticano fue recibido con alegría tanto en la Iglesia argentina como en los círculos empresariales, especialmente en ACDE, organización que Shaw fundó en 1952 para promover los valores cristianos en la vida empresarial.

Durante su carrera, Shaw se destacó por su enfoque humanista de la empresa, promoviendo el diálogo entre empleadores y sindicatos, la mejora de las condiciones laborales y la dignidad de los trabajadores. Ejemplos de su gestión incluyen la creación de cooperativas para empleados despedidos y la implementación de políticas de bienestar social en la empresa. Su vida y obra han sido consideradas ejemplares por la Iglesia, que lo reconoce como pionero en la aplicación de la Doctrina Social en el ámbito empresarial argentino.

El proceso de beatificación, iniciado por el entonces cardenal Jorge Bergoglio, hoy papa Francisco, culmina con este reconocimiento, aunque la canonización requerirá la confirmación de un segundo milagro. La ceremonia de beatificación se celebrará en Buenos Aires, en una fecha aún por determinar, y se espera que Shaw se convierta en el primer beato plenamente identificado como empresario industrial en la historia argentina. Su legado sigue inspirando a líderes empresariales y sociales, quienes ven en su figura un modelo de compromiso ético y vocación de servicio.