El presidente Javier Milei encabezó este miércoles una reunión de gabinete en la Casa Rosada, en un contexto marcado por la volatilidad financiera y la cercanía de las elecciones legislativas. El encuentro, que se extendió por cerca de dos horas en el Salón Eva Perón, tuvo como ejes principales la definición de estrategias para afrontar la incertidumbre económica y la gestión de la campaña electoral.

La reunión se desarrolló bajo un fuerte hermetismo, aunque trascendió que Milei instó a sus ministros a recuperar la iniciativa política y a mantener la unidad interna. El mandatario también abordó la situación del diputado José Luis Espert, primer candidato a diputado por la provincia de Buenos Aires, quien enfrenta acusaciones de haber recibido fondos de un empresario vinculado al narcotráfico. Mientras Milei minimizó la denuncia calificándola de "chimento de peluquería", la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, pidió explicaciones públicas y consideró que el caso debe ser aclarado cuanto antes.

Fuentes oficiales aseguraron que no se prevén cambios en la composición de las listas y que el respaldo a Espert es casi total dentro del oficialismo. Sin embargo, la polémica generó tensiones internas y obligó a reprogramar actividades de campaña, incluyendo una foto de respaldo en San Isidro y recorridas en Santa Fe y Entre Ríos.

En el plano económico, el Gobierno atribuye la volatilidad financiera al clima electoral y descarta anuncios de magnitud antes de los comicios. La relación con Estados Unidos y la próxima reunión bilateral entre Milei y Donald Trump en la Casa Blanca son vistas como oportunidades clave para fortalecer la gestión y estabilizar el escenario local.

El oficialismo enfrenta el desafío de sostener la disciplina interna y evitar que el escándalo en torno a Espert erosione su imagen en la recta final de la campaña. Analistas advierten que la apuesta por la unidad y el respaldo cerrado podría tener costos si el tema judicial gana centralidad en el debate público. Mientras tanto, el Gobierno confía en que la contención política y el apoyo internacional permitan atravesar la turbulencia hasta las elecciones del 26 de octubre.