La reciente derrota electoral de La Libertad Avanza (LLA) en la provincia de Buenos Aires ha desencadenado una crisis interna en el espacio libertario, marcada por tensiones entre la militancia juvenil y la dirigencia partidaria. Tras perder por más de 13 puntos frente al peronismo, la base digital y juvenil de LLA, liderada en redes sociales por Daniel Parisini, conocido como el Gordo Dan, expresó su descontento y exigió cambios en la conducción, apuntando especialmente contra Sebastián Pareja y Lule Menem.

En los días posteriores al revés electoral, las redes sociales se llenaron de tendencias como #ParejaRenuncia y #MileiEscuchanos, reflejando la frustración de la militancia. Parisini, quien hasta entonces había sido un vocero oficioso del oficialismo, anunció públicamente su distanciamiento del gobierno y su intención de actuar como "libre pensador". "Acepten mi fantinización. No soy parte del Gobierno", transmitió a la Casa Rosada, marcando un quiebre en la relación con la cúpula.

A pesar de las presiones, la dirigencia de LLA, con el respaldo de Karina Milei, decidió ratificar a Sebastián Pareja como jefe de campaña para las próximas elecciones legislativas. Esta decisión fue tomada en una tensa reunión de la mesa bonaerense, donde se reconocieron errores estratégicos, como la subestimación del aparato peronista y la falta de movilización del electorado. "El kirchnerismo realizó una movilización masiva como nunca antes se había visto", admitieron desde LLA Buenos Aires.

El PRO, socio clave en la provincia, también expresó su preocupación por la falta de estrategia y la exposición de las internas libertarias. "Les pedimos que solucionen de manera urgente su interna y no la trasladen más a la campaña. Necesitamos redefinir una estrategia de cara a octubre porque así vamos mal", reclamó un dirigente durante el encuentro en Casa Rosada.

La fractura interna y la rebelión de la militancia digital ponen en riesgo la cohesión de LLA en un momento clave, especialmente considerando que el voto joven ha sido uno de los principales sustentos electorales de Javier Milei. De cara a las legislativas de octubre, la campaña bonaerense buscará adoptar un nuevo formato y mayor autocrítica, aunque persisten las dudas sobre la capacidad del espacio para superar sus divisiones y remontar la desventaja electoral.