El conflicto salarial en el transporte público del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) se profundizó en los últimos días, luego de que la Unión Tranviarios Automotor (UTA) declarara el estado de alerta ante la posibilidad de que el aguinaldo de los choferes de colectivos sea abonado en cuotas. La medida surge tras una audiencia en la Secretaría de Trabajo, donde el sindicato expresó su preocupación por la falta de avances en la recomposición salarial y la creciente incertidumbre sobre los haberes de los trabajadores.

Según la UTA, la reunión con empresarios y autoridades estatales se centró exclusivamente en el reclamo empresarial por la actualización de los subsidios al transporte, dejando de lado las demandas salariales de los choferes. “Nuestra justa retribución no puede estar atada a la relación entre el Estado y los empresarios”, advirtió la dirigencia sindical, que exige el pago íntegro y puntual de salarios y aguinaldo, especialmente en vísperas de las fiestas de fin de año.

Del lado empresarial, las cámaras que agrupan a las empresas de colectivos sostienen que la situación es “gravísima” debido al aumento sostenido de los costos operativos, como combustible y repuestos, y la insuficiencia de los subsidios estatales. De acuerdo con la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA), la tarifa reconocida por el Estado es de $1.092, mientras que la “tarifa real” calculada por el sector asciende a $1.713, lo que vuelve insostenible el pago regular de salarios y aguinaldos.

El conflicto ya tuvo consecuencias directas en el servicio: el pasado 5 de diciembre, la UTA realizó una abstención de tareas en empresas que no habían depositado al menos el 50% del salario, afectando a miles de pasajeros en el AMBA. Algunas líneas, como las administradas por MOQSA y MOGSM, mantuvieron la medida de fuerza ante la falta de respuestas satisfactorias.

El salario promedio de un chofer de colectivo ronda el millón y medio de pesos mensuales, cifra que el gremio considera insuficiente frente a la inflación. La UTA solicitó la intervención inmediata de las autoridades estatales para garantizar el cumplimiento de la legislación vigente y la reapertura de una mesa de negociación salarial “sin ataduras” a la discusión de los subsidios.

El depósito del medio aguinaldo correspondiente a diciembre debe concretarse hasta el 18 de diciembre, aunque la normativa permite un margen adicional hasta el 24. Mientras tanto, la incertidumbre persiste y el conflicto amenaza con nuevas medidas de fuerza, en un contexto de creciente tensión social y económica en el sector del transporte público.