En un nuevo cambio en el gabinete del presidente Javier Milei, Franco Mogetta ha sido desplazado de la Secretaría de Transporte, marcando el despido número 140 en los 505 días de gestión. Mogetta, quien asumió el cargo en diciembre de 2023, enfrentó críticas por el aumento del boleto de transporte y un paro nacional de la UTA, lo que habría precipitado su salida. Aunque el gobierno elogió su gestión, justificó su desplazamiento argumentando su interés en postularse como candidato, una versión que Mogetta no confirmó.

Luis Pierrini, un empresario mendocino con experiencia en el sector asegurador, ha sido designado como su reemplazo. Pierrini, cercano al ministro de Economía Luis "Toto" Caputo, asume el cargo en un momento clave para el sector, con reformas en marcha que incluyen la disolución de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) y la posible fusión de organismos vinculados al transporte aerocomercial. Estas medidas forman parte de una estrategia más amplia de desregulación y reducción del aparato estatal, liderada por Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación y Transformación del Estado.

La salida de Mogetta también refleja tensiones políticas entre el gobierno nacional y sectores del cordobesismo, que han cuestionado la falta de federalismo en las políticas del Ejecutivo. Mogetta, quien llegó al gabinete por sus vínculos financieros y no por influencia política, había enfrentado desafíos significativos, como la eliminación de subsidios al transporte en el interior del país, lo que generó aumentos en los boletos y descontento social.

La designación de Pierrini ha generado críticas debido a su falta de experiencia en el sector transporte, aunque se destaca su perfil técnico y su alineación con la agenda libertaria del gobierno. Su llegada al cargo consolida la influencia de Caputo en el gabinete y marca un cambio de rumbo en una de las áreas más sensibles del Ejecutivo.

Este cambio en el gabinete se produce en un contexto de alta rotación de funcionarios en la gestión de Milei, especialmente en áreas clave como Economía y Capital Humano. La estabilidad y efectividad de estas reformas serán cruciales para el futuro del gobierno y su capacidad para implementar su agenda libertaria.