A medida que se acerca el cierre de listas para las elecciones provinciales del 7 de septiembre, la política bonaerense atraviesa jornadas de intensas negociaciones y disputas internas. El peronismo, reunido bajo el nuevo frente Fuerza Patria, acelera la definición de candidaturas en un contexto marcado por la necesidad de mantener la unidad y la competitividad electoral.

Las conversaciones, lideradas por Axel Kicillof, Máximo Kirchner y Sergio Massa, han sido descritas como frenéticas y, en ocasiones, tensas. Según fuentes de los distintos espacios, las discusiones incluyeron momentos de agresividad verbal, aunque finalmente se alcanzó un acuerdo para presentar una lista conjunta. "El único criterio es poner a los candidatos más competitivos, los que nos aseguren un mayor caudal de votos para ponerle un freno a la motosierra de Milei", afirmó Carlos Bianco, ministro de Gobierno bonaerense.

Entre los nombres que suenan con más fuerza para encabezar las listas en las distintas secciones electorales se encuentran la vicegobernadora Verónica Magario y el intendente de Almirante Brown, Mariano Cascallares, en la estratégica Tercera Sección. En la Primera, el ministro Gabriel Katopodis y el intendente Leonardo Nardini aparecen como opciones principales. El kirchnerismo, el kicillofismo y el massismo buscan equilibrar el reparto de candidaturas para sostener el poder territorial y evitar fracturas internas.

El cierre de listas también impacta en las alianzas opositoras, como Somos Buenos Aires, que enfrenta sus propias tensiones y desafíos de coherencia interna. La campaña se desarrolla en un clima de fragmentación política y polarización nacional, con la condena a Cristina Kirchner y la situación económica como telón de fondo.

Más de 13 millones de bonaerenses están habilitados para votar en estos comicios, que renovarán cargos provinciales y municipales. El operativo electoral prevé la participación de 39 mil efectivos de la policía bonaerense y 6 mil de la federal, además de la capacitación de autoridades de mesa y la distribución de material electoral en toda la provincia.

Las definiciones finales sobre las candidaturas se esperan para el último minuto del plazo legal, con escenarios aún abiertos y la posibilidad de sorpresas de último momento. El resultado de estas negociaciones será clave para el futuro político del peronismo bonaerense y su capacidad de enfrentar los desafíos electorales en un contexto de alta volatilidad.