Fabio Rosa Carvalho, conocido como "Noia", fue detenido en el barrio porteño de Caballito tras una extensa investigación internacional. Carvalho, de 41 años, era buscado por Interpol desde 2023, cuando se fugó de una cárcel en Brasil, donde cumplía una condena de casi 17 años por narcotráfico y homicidios vinculados a la banda criminal "Os Manos" y al Primer Comando Capital (PCC).

Durante su estadía en Argentina, Carvalho adoptó identidades falsas, como Lucas Rodrigues y Gilmar Dos Santos, y se integró en la vida social mendocina como futbolista amateur, destacándose como goleador en torneos locales. Nadie sospechó de su verdadera identidad, ni siquiera sus compañeros de equipo, quienes lo describían como un jugador querido y sin antecedentes de comportamiento problemático.

La investigación que llevó a su captura comenzó cuando la Policía Civil de Río Grande do Sul detectó movimientos bancarios y el uso de una billetera virtual con reconocimiento facial en Córdoba. A partir de estos datos, las fuerzas de seguridad argentinas y brasileñas coordinaron un operativo conjunto que culminó con su arresto en Buenos Aires, tras rastrear consumos con tarjeta de crédito y realizar seguimientos por cámaras de seguridad.

Carvalho está señalado como jefe de "Os Manos", organización criminal responsable de al menos 150 homicidios y vinculada al narcotráfico internacional, tráfico de armas y lavado de activos. El informe del Ministerio Público de San Pablo confirma la presencia de miembros del PCC en Argentina, lo que refuerza la preocupación sobre la expansión del crimen organizado en la región.

La detención de Carvalho fue recibida con sorpresa por la comunidad mendocina, especialmente en el ámbito del fútbol amateur, donde era conocido y apreciado. Las autoridades destacaron la importancia de la cooperación internacional y el uso de tecnología para la identificación y captura de prófugos de alta peligrosidad.

Este caso pone en evidencia la capacidad de organizaciones criminales para operar transnacionalmente y la necesidad de fortalecer los mecanismos de control y cooperación entre países. La extradición de Carvalho a Brasil marca un precedente en la lucha contra el crimen organizado en el Cono Sur y deja abierta la discusión sobre la seguridad y el impacto de estas redes en la sociedad argentina.