El miércoles 6 de agosto, el frigorífico Dicasur de Trevelin, Chubut, fue escenario de un violento asalto que conmocionó a la comunidad local. Dos hermanos, Daniel Ernesto Massini y Mariano Raúl Massini, ingresaron al establecimiento bajo el pretexto de una reunión comercial con el propietario, Rafael Nataine. Según la reconstrucción judicial y las imágenes de seguridad presentadas en la audiencia, el encuentro derivó rápidamente en una agresión física y amenazas de muerte.

Durante la reunión, Daniel Massini extrajo una pistola calibre 9 mm y, junto a su hermano, exigió dinero de manera violenta, amenazando a Nataine y a su familia. Ambos golpearon al dueño del frigorífico, provocándole fracturas nasales y otras lesiones graves que requieren intervención quirúrgica. Además, sustrajeron dos teléfonos celulares antes de huir en una camioneta Volkswagen Amarok.

La rápida intervención policial permitió interceptar a los agresores en un puesto de control sobre la Ruta 259, en dirección a Esquel. En el operativo se secuestró la camioneta, el arma utilizada y los celulares robados, uno de los cuales fue hallado dañado a la vera de la ruta. La fiscalía, encabezada por María Bottini, calificó el hecho como extorsión en grado de tentativa, lesiones graves y robo calificado por el uso de arma de fuego.

En la audiencia de control de detención, el juez penal José Luis Ennis dispuso prisión preventiva por 60 días para Daniel Massini, mientras que Mariano Massini recibió una prohibición de acercamiento a la víctima, su familia y empleados del frigorífico por el mismo plazo. La defensa de los imputados argumentó que el episodio se originó por el cobro de una deuda millonaria, pero la fiscalía desestimó esa versión, señalando la ausencia de documentación y la violencia ejercida.

El hecho ha generado preocupación en el sector ganadero y entre los trabajadores de Dicasur, quienes temen por la estabilidad laboral y la seguridad en la planta. El gremio de la carne manifestó sorpresa por el incidente, destacando la importancia de la empresa en la región. La víctima, Rafael Nataine, permanece en estado de shock y recibe asistencia especializada.

La investigación sigue en curso, con peritajes sobre los elementos secuestrados y el análisis de las imágenes de seguridad, mientras la justicia evalúa las responsabilidades penales y el impacto del caso en la comunidad de Trevelin y Esquel.