Universidades nacionales argentinas, encabezadas por la Universidad de Buenos Aires (UBA) y la Universidad Nacional de Cuyo (UNCUYO), manifestaron su profunda preocupación ante el recorte presupuestario del 30% previsto para los hospitales universitarios en el proyecto de Presupuesto 2026 impulsado por el Gobierno nacional. La denuncia fue formalizada a través de resoluciones de los Consejos Superiores de ambas instituciones, que advierten sobre el impacto negativo que la medida tendría en la atención de más de 700.000 pacientes anuales y en la formación de profesionales de la salud.

El ajuste presupuestario, calificado como "brutal recorte" por la UBA, afectaría a hospitales emblemáticos como el Hospital de Clínicas General San Martín, el Instituto de Oncología Ángel H. Roffo y el Instituto de Investigaciones Médicas Dr. Alfredo Lanari. Estas instituciones cumplen un rol clave en la prestación de servicios de alta complejidad y en la investigación médica, además de ser espacios fundamentales para la formación universitaria.

A la reducción de fondos se suma la preocupación por la posible derogación de la Ley de Financiamiento Universitario, recientemente aprobada por el Congreso. Según las universidades, la eliminación de esta norma pondría en riesgo la transparencia y estabilidad de los recursos destinados al sistema universitario nacional, así como la recomposición salarial de docentes, no docentes y personal científico, cuyo poder adquisitivo cayó más del 45% en los últimos dos años.

El Consejo Superior de la UBA solicitó formalmente a la Cámara de Diputados y al Senado de la Nación que rechacen o modifiquen el dictamen del proyecto presupuestario y garanticen el pleno funcionamiento de las universidades nacionales. Por su parte, la UNCUYO advirtió que el presupuesto propuesto no contempla la inflación ni las actualizaciones salariales pendientes, y que el desfinanciamiento afecta también a la ciencia, la técnica y las becas estudiantiles.

La situación ha generado movilizaciones y declaraciones institucionales en defensa de la educación y la salud públicas. "El ajuste en salud enferma", expresaron trabajadores y pacientes del Instituto Roffo, mientras que las autoridades universitarias insisten en la necesidad de un presupuesto adecuado para sostener la calidad y la inclusión en el sistema universitario argentino. El debate continúa en el Congreso, donde se definirán los recursos para el sector en 2026.