Telefe, el canal de televisión de mayor audiencia en Argentina, fue vendido al grupo empresario liderado por el rosarino Gustavo Scaglione, marcando el fin de la presencia de Paramount en el mercado local. La operación, que se concretó el 30 de septiembre, implica un traspaso accionario que se extenderá por varias semanas hasta la firma definitiva del acuerdo.

El proceso de venta fue ampliamente comentado durante la reciente entrega de los premios Martín Fierro y representa un cambio significativo en la estructura de propiedad de los medios argentinos. Paramount, que había adquirido Telefe en 2016 por 345 millones de dólares, decidió desprenderse del canal como parte de una reestructuración global tras su fusión con SkyDance Media. Según fuentes del sector, el monto de la operación actual rondaría entre 100 y 120 millones de dólares, reflejando la depreciación de activos en el contexto económico argentino.

La venta de Telefe no solo incluye el canal principal de Buenos Aires, sino también señales regionales como Canal 8 de Córdoba, Canal 5 de Rosario y Canal 13 de Santa Fe, además del canal internacional Telefe Internacional, que llega a 17 millones de abonados en 17 países. El canal produce más de 3.000 horas anuales de contenido y gestiona un catálogo de más de 33.000 horas de material audiovisual.

Durante el proceso de venta, se presentaron múltiples interesados, entre ellos Alpha Media, liderado por Marcelo Fígoli, y un consorcio encabezado por Tomás Yankelevich. Sin embargo, la propuesta de Scaglione se impuso, consolidando su posición como uno de los principales actores del sector mediático nacional. Scaglione ya controla medios como El Tres de Rosario y el diario La Capital, y ha participado en proyectos junto a Daniel Vila y José Luis Manzano.

La salida de Paramount se inscribe en una tendencia más amplia de retiro de capitales extranjeros del sector de medios y telecomunicaciones en Argentina, fenómeno que contrasta con la ola de inversiones extranjeras de décadas anteriores. "Por primera vez en casi 30 años, la principal cadena televisiva del país pasará a manos argentinas", destacó Letra P, subrayando el impacto de la operación en el mapa mediático nacional.

Se espera que la nueva gestión de Telefe redefina la estrategia de contenidos y expansión del canal, en un contexto de creciente concentración de medios en manos de grupos nacionales. El desenlace de esta operación podría marcar el inicio de una nueva etapa para la televisión argentina, con implicancias en la diversidad y pluralidad informativa.