Un corte masivo de gas natural afectó a gran parte de Mar del Plata el miércoles 2 de julio, en medio de una ola de frío extremo que llevó las temperaturas a mínimos históricos. El evento, considerado "histórico" por autoridades sindicales, dejó sin suministro a miles de hogares y comercios en numerosos barrios, generando la suspensión de clases y el cierre de actividades culturales y deportivas en toda la ciudad.

La interrupción del servicio comenzó cerca de las 18:30 y se extendió rápidamente a zonas como Bosque Peralta Ramos, Rumencó, Santa Celina, Playa Grande, Alto Camet, Constitución, Malvinas Argentinas, Libertad, Colinas de Peralta Ramos y Parque Luro, entre otros. Según explicó Rodrigo Espinosa, director de Camuzzi Gas Pampeana, la baja presión en los gasoductos, producto del alto consumo por las bajas temperaturas, activó los mecanismos automáticos de corte en los medidores domiciliarios. "Los reguladores registran baja presión y, por seguridad, se cortan. Ya recibimos 140 reclamos pero naturalmente son muchos más", detalló Espinosa, quien remarcó que la reconexión debe ser realizada únicamente por personal de la empresa.

El intendente Guillermo Montenegro activó el Protocolo de Crisis y anunció la suspensión de clases en todos los niveles y turnos para el jueves 3 de julio. "Se está trabajando en hospitales, clínicas y geriátricos, que son lugares críticos. Estoy en permanente contacto no sólo con Camuzzi sino con autoridades del Gobierno Nacional", afirmó Montenegro. Además, se dispuso el cierre de restaurantes y cafés en el turno nocturno, así como la interrupción del suministro a estaciones de GNC, industrias y centros comerciales, con el objetivo de priorizar el restablecimiento en sectores esenciales.

Desde Camuzzi, se solicitó a los usuarios no intentar reconectar el servicio por cuenta propia y reportar los cortes al call center para organizar la intervención de los operarios. El secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Industria del Gas, Ezequiel Serra, advirtió que la recuperación del servicio será paulatina y podría demorar debido a la cantidad limitada de personal disponible.

El corte de gas se produce en un contexto de temperaturas extremas, con registros de hasta -5,6°C y sensación térmica de -10°C, lo que incrementó la demanda y puso al sistema al límite. Las autoridades locales y la empresa distribuidora mantienen contacto con el gobierno nacional y proveedores para gestionar la crisis y restablecer el servicio lo antes posible, priorizando los sectores más vulnerables.