La construcción del nuevo Puente Carretero que conectará las ciudades de Santa Fe y Santo Tomé avanza a ritmo sostenido, consolidándose como una de las obras de infraestructura más relevantes de la región. Esta semana, las autoridades provinciales y responsables de la obra confirmaron la colocación de las primeras vigas longitudinales, fabricadas en San Luis, marcando un hito en el desarrollo del proyecto.

El Administrador General de la Dirección Provincial de Vialidad, Pablo Seghezzo, destacó en conferencia de prensa que la obra ya alcanzó entre un 25% y un 30% de avance, con más del 90% de los pilotes ejecutados y el inicio del primer pilote sobre el río Salado. "Poner las primeras vigas es un hito, es importantísimo", señaló Seghezzo, quien también anticipó que en enero llegará una máquina lanza vigas de origen chino, lo que permitirá intensificar el ritmo de trabajo tras la feria de fin de año.

El operativo de traslado de las vigas, de 30 metros de largo, requiere una logística especial y la coordinación de vehículos guía a lo largo de varias rutas nacionales. Cada vano del puente necesita cinco vigas, y el objetivo inmediato es completar dos vanos antes de las fiestas de fin de año. El terraplén de avance, aprobado por las autoridades hídricas y ambientales, permite mantener el flujo del río Salado y continuar con la construcción de la infraestructura principal.

El senador Julio Garibaldi, por su parte, celebró el avance visible de la obra y remarcó que el presupuesto provincial 2026 garantiza la continuidad total de los trabajos. "El puente es una prioridad indiscutida dentro del esquema de inversiones públicas, no solo por su impacto en la movilidad cotidiana sino también por su relevancia logística", afirmó el legislador.

El nuevo puente, que duplicará la calzada existente, está diseñado para mejorar la circulación entre Santa Fe y Santo Tomé, permitiendo que el puente actual quede habilitado para el tránsito en sentido contrario. La obra, que comenzó en marzo de 2025, cuenta con una inversión provincial superior a los $39.800 millones y está a cargo de una Unión Transitoria de Empresas.

Se prevé que la inauguración del nuevo enlace carretero se concrete antes de marzo de 2027, en línea con los plazos establecidos por las autoridades. El proyecto se enmarca en un plan más amplio de infraestructura y conectividad para la región, que incluye incentivos fiscales para el sector productivo y mejoras urbanas complementarias.