El consorcio Vaca Muerta Oleoducto Sur (VMOS), integrado por YPF y otras siete grandes petroleras, obtuvo un crédito internacional de 2.000 millones de dólares para financiar la construcción de un oleoducto de más de 430 kilómetros en la Patagonia. Se trata del mayor préstamo comercial para infraestructura en la historia argentina y uno de los más importantes en el sector energético de América Latina.

El financiamiento, liderado por bancos internacionales como Citi, JP Morgan, Deutsche Bank, Santander e Itaú, permitirá cubrir dos tercios del costo total del proyecto, estimado en más de 3.000 millones de dólares. El tercio restante será aportado por las empresas socias del consorcio. El crédito se estructuró bajo la modalidad de project finance, en la que los bancos asumen el riesgo sobre los ingresos futuros del proyecto, y no sobre los balances individuales de las compañías.

El oleoducto, que conectará Allen con Punta Colorada en la provincia de Río Negro, permitirá exportar crudo directamente desde un puerto de aguas profundas en el Atlántico. La obra, que comenzó a construirse en los primeros meses de 2025, prevé estar operativa hacia fines de 2026, con una capacidad inicial de transporte de 180.000 barriles diarios, que se incrementará a 550.000 barriles diarios en 2027. El puerto podrá recibir buques de gran porte, lo que reducirá los costos logísticos y abrirá nuevos mercados para el crudo argentino.

El proyecto se enmarca en el Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI), recientemente aprobado, que otorga beneficios fiscales y cambiarios para inversiones superiores a 200 millones de dólares. Según Horacio Marín, presidente de YPF, “este crédito es el más grande de la historia argentina para una obra de infraestructura” y fue posible gracias a la estabilidad jurídica y fiscal que brinda el nuevo régimen.

La concreción del financiamiento se produce en un contexto de litigios internacionales por la expropiación de YPF, pero los analistas destacan que la confianza de los bancos internacionales en el sector energético argentino se mantiene firme. El consorcio VMOS está compuesto por YPF, Pluspetrol, Pan American Energy, Pampa Energía, Vista, Chevron, Shell, Tecpetrol y Gas y Petróleo de Neuquén.

Se espera que el proyecto incremente significativamente las exportaciones energéticas argentinas, con estimaciones de hasta 14.000 millones de dólares anuales adicionales a partir de 2027. El desarrollo de Vaca Muerta, una de las mayores reservas de hidrocarburos no convencionales del mundo, es considerado clave para el futuro económico del país.