A nueve meses de la trágica inundación que azotó Bahía Blanca y dejó 18 víctimas fatales, el pedido de reconocimiento para Rubén Zalazar, el chofer que intentó salvar a las hermanas Pilar y Delfina Hecker, vuelve a tomar fuerza. Marina Haag, madre de las niñas fallecidas, renovó su reclamo a las autoridades municipales para que Zalazar sea homenajeado como héroe local.

El 7 de marzo, la familia Hecker quedó atrapada en su vehículo por la fuerza del agua en la ruta 3. Rubén Zalazar, conductor de una camioneta de la empresa Andreani, se detuvo para asistirlos sin conocerlos previamente. En medio del desesperado intento de rescate, una violenta correntada separó a Marina de su hija menor, Delfina, y arrastró a los involucrados. Zalazar perdió la vida junto a las niñas en el intento de salvarlas.

El cuerpo de Zalazar fue hallado el 9 de marzo, a unos 150 metros del lugar donde la madre de las niñas fue rescatada. Pilar, de cinco años, fue encontrada a comienzos de abril a 40 kilómetros de donde fue vista por última vez, y Delfina, de un año, fue hallada el 26 de abril en la Base Naval Puerto Belgrano, tras estudios genéticos que confirmaron su identidad. Las pericias determinaron que ambas murieron por ahogamiento.

Desde entonces, Marina Haag ha manifestado su dolor y su incansable pedido de reconocimiento para Zalazar. “Estoy cansada, pero no voy a parar hasta que se haga el reconocimiento de Rubén como un héroe en Bahía Blanca. Dos hijos se quedaron sin su padre y dos padres sin sus hijas hace 9 meses”, expresó en redes sociales.

El caso generó una fuerte conmoción en la ciudad y el país, reavivando el debate sobre la respuesta ante emergencias climáticas y la necesidad de homenajear los gestos solidarios. Hasta el momento, las autoridades municipales no han emitido una respuesta formal al pedido de la familia Hecker, mientras la comunidad sigue considerando a Zalazar un ejemplo de heroísmo y entrega.