El Ministerio de Salud de Mendoza, en colaboración con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), presentó una estrategia pionera para reducir la alta tasa de cesáreas innecesarias en clínicas privadas de la provincia. Actualmente, cerca del 80% de los partos en el sector privado mendocino se realizan por cesárea, una cifra que supera ampliamente el rango recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que sugiere que solo entre el 10% y el 15% de los nacimientos deberían requerir esta intervención quirúrgica.

La nueva política, que comenzará a implementarse en julio de 2026, busca promover partos más seguros y respetados, alineados con las mejores prácticas internacionales y las leyes nacionales de parto humanizado. El plan contempla que los nacimientos sean atendidos por equipos de obstetricia de guardia, en lugar de limitarse al obstetra que acompañó el embarazo, y establece un esquema de pago igualitario para partos y cesáreas, eliminando incentivos económicos que favorezcan la intervención quirúrgica.

El ministro de Salud mendocino, Rodolfo Montero, explicó que la iniciativa responde a la necesidad de abordar un problema de salud pública multifactorial, donde influyen tanto factores culturales como organizativos y económicos. "La cesárea salva vidas cuando está indicada, pero sin justificación médica aumenta los riesgos para la madre y el recién nacido", afirmó Montero. Por su parte, la representante de la OPS en Argentina, Eva Jané Llopis, calificó la estrategia como "innovadora, integral y basada en evidencia".

El plan incluye formación continua para los equipos de salud, auditorías, campañas de sensibilización y la participación activa de organizaciones, familias y mujeres gestantes. Un comité técnico evaluará periódicamente los resultados, monitoreando indicadores como la tasa global de cesáreas, complicaciones maternas y neonatales, y la satisfacción de las usuarias.

Algunos profesionales de la obstetricia han manifestado su apoyo a la reducción de cesáreas innecesarias, aunque advierten sobre la importancia de respetar la elección de las familias respecto al profesional que asiste el parto. La presidenta de la asociación de obstetras de Mendoza, Flor Forno, subrayó que el plan debe orientarse hacia el "nacimiento respetado" y que los honorarios de los profesionales no deberían verse afectados negativamente.

La estrategia mendocina se perfila como un modelo que podría ser replicado en otras provincias argentinas, en un contexto donde la tasa nacional de cesáreas alcanza el 43,3% y el debate sobre la medicalización del parto sigue vigente. Las autoridades y organismos internacionales coinciden en que reducir las cesáreas innecesarias es clave para mejorar la salud materna y neonatal, así como para optimizar los recursos del sistema de salud.