Las intensas tormentas que azotaron la provincia de Buenos Aires desde el viernes han dejado un saldo devastador, con más de 3.100 personas evacuadas y múltiples municipios en alerta roja. Zárate, una de las localidades más afectadas, registró acumulados de lluvia de hasta 400 milímetros en menos de 24 horas, lo que provocó inundaciones severas y cortes totales en rutas clave como la 8 y la 9, así como en el Puente Zárate-Brazo Largo.

El gobierno provincial, liderado por Axel Kicillof, estableció un Comando de Incidencias en Puente 12, La Matanza, para coordinar las acciones de rescate y asistencia. "El agua que cayó superó todo lo previsto, no solo en cantidad, sino en tiempo", declaró Fabián García, director de Defensa Civil de la Provincia. En Zárate, el agua alcanzó niveles de hasta un metro en algunas zonas, dejando barrios enteros anegados y familias evacuadas. "Perdimos todo", relató Camilo Ribas, un vecino de San Cayetano, uno de los barrios más afectados.

Además de las evacuaciones, más de 50.000 usuarios permanecen sin suministro eléctrico en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Las autoridades han distribuido alimentos, frazadas y kits de limpieza, mientras que instituciones locales, como clubes deportivos, han ofrecido sus instalaciones para alojar a los evacuados. "Estamos trabajando con el municipio, bomberos y defensa civil para alojar gente en nuestro gimnasio de básquet", señaló Pablo Fariña, directivo del Club Defensores Unidos de Zárate.

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) explicó que este fenómeno climático es resultado de la interacción de frentes cálidos y fríos, lo que generó lluvias intensas y persistentes. Se espera que las condiciones climáticas adversas persistan hasta el domingo, con un descenso marcado de las temperaturas a partir de la próxima semana.

En este contexto, las autoridades han instado a la población a extremar las precauciones y evitar transitar por las zonas afectadas. "Para ser muy claros con el pueblo de la provincia: muchísima precaución, intentar no circular sobre todo en las zonas más afectadas", advirtió el gobernador Kicillof. Mientras tanto, expertos subrayan la necesidad de mejorar la infraestructura y los sistemas de alerta temprana para prevenir futuras crisis de esta magnitud.