Un dramático episodio conmocionó al rugby marplatense este sábado, cuando Lucas Cedarry, jugador de Sporting, sufrió convulsiones tras recibir un fuerte golpe durante el partido de Intermedia frente a San Ignacio, por la sexta fecha del Torneo Regional Pampeano A. El encuentro, disputado en el predio de Valle Hermoso, debió ser suspendido junto con el partido de Primera, programado a continuación, debido al impacto emocional y la gravedad de la situación.

El incidente ocurrió a los 16 minutos del primer tiempo, cuando Cedarry cayó al suelo tras un tackle y comenzó a convulsionar. Ezequiel Echeveste, jugador de San Ignacio y guardavidas de profesión, intervino de inmediato y le practicó maniobras de RCP, mientras otros asistentes buscaban el desfibrilador del club. "Salió la pelota de un scrum y por un golpe el jugador de Sporting cayó ya convulsionando. Tuvo un paro respiratorio, por lo que decidí empezar con las maniobras de RCP", relató Echeveste a medios locales.

La rápida reacción del personal médico y de los presentes permitió estabilizar a Cedarry, quien fue trasladado en ambulancia al Hospital Privado de Comunidad. Los estudios realizados descartaron lesiones graves y el jugador permanece en observación por 48 horas como medida preventiva. "Está consciente, de buen ánimo y en condiciones generales estables", informaron desde Sporting en un comunicado oficial. Horas después, Cedarry envió un mensaje de agradecimiento a sus compañeros y seguidores, llevando tranquilidad a la comunidad deportiva.

El episodio puso en relieve la importancia de contar con protocolos de seguridad y desfibriladores en eventos deportivos. Sporting y San Ignacio destacaron públicamente la correcta aplicación de los procedimientos y el accionar de Echeveste, quien fue reconocido como héroe por su intervención. "Más allá de la rivalidad, lo más importante siempre es la salud y el bienestar de los jugadores", expresaron desde San Ignacio.

La suspensión de los partidos y la reacción de los clubes evidencian el compromiso del rugby marplatense con la seguridad de sus deportistas. El hecho reavivó el debate sobre la necesidad de reforzar los protocolos médicos en el deporte argentino, mientras la comunidad local celebra el desenlace favorable y espera la pronta recuperación de Cedarry.