En Córdoba, Argentina, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) ha emitido un alerta amarilla debido a la posibilidad de tormentas fuertes, lluvias intensas y caída de granizo. Este fenómeno afecta principalmente a la capital y al sur provincial, incluyendo los departamentos General Roca y Presidente Roque Sáenz Peña. Según el SMN, las precipitaciones acumuladas podrían oscilar entre 40 y 70 milímetros, con ráfagas de viento de hasta 60 kilómetros por hora y actividad eléctrica.

La Municipalidad de Córdoba también ha emitido un aviso preventivo para la capital, donde se esperan lluvias y tormentas entre las 00:00 y las 10:00 horas del jueves 24 de abril. Aunque la probabilidad de caída de granizo es baja, las autoridades han instado a la población a tomar precauciones, como evitar transitar por calles inundadas y asegurar objetos que puedan ser desplazados por el viento.

El técnico en meteorología Rafael Di Marco amplió el pronóstico a otras provincias como San Luis, Santa Fe y Entre Ríos, donde los acumulados de lluvia podrían alcanzar hasta 150 milímetros en algunas zonas. En Córdoba, las temperaturas han mostrado fluctuaciones significativas en los últimos días, con máximas que han oscilado entre los 20°C y 33°C. Este patrón de variabilidad térmica se espera que continúe hasta los primeros días de mayo.

Este tipo de fenómenos meteorológicos son característicos del otoño en la región, marcados por fluctuaciones térmicas y tormentas eléctricas. Sin embargo, expertos señalan que el cambio climático ha intensificado la frecuencia y severidad de estos eventos, subrayando la importancia de los sistemas de alerta temprana para mitigar riesgos.

La población ha mostrado preocupación en redes sociales, compartiendo imágenes de cielos nublados y preparativos ante las tormentas. Las autoridades locales han reforzado la comunicación para garantizar que los ciudadanos estén informados y preparados. "Es crucial que todos sigamos las recomendaciones para evitar riesgos innecesarios", señaló un portavoz de la Municipalidad de Córdoba.

En conclusión, Córdoba enfrenta un evento meteorológico significativo que pone a prueba la preparación de sus sistemas de alerta y la capacidad de respuesta de sus habitantes. Las próximas horas serán clave para evaluar el impacto de estas condiciones climáticas y la efectividad de las medidas preventivas adoptadas.