En junio de 2025, Argentina vivirá una semana laboral reducida debido a dos feriados nacionales consecutivos que generan fines de semana largos. Estos días conmemoran el Paso a la Inmortalidad de dos figuras clave de la historia argentina: Martín Miguel de Güemes y Manuel Belgrano.

El primer feriado será el lunes 16 de junio, en honor a Martín Miguel de Güemes, líder de la Guerra Gaucha y figura clave en la independencia argentina. Aunque su aniversario es el 17 de junio, el gobierno decidió trasladarlo al lunes para generar un fin de semana largo que fomente el turismo interno. Este descanso abarcará desde el sábado 14 hasta el lunes 16 de junio.

El segundo feriado será el viernes 20 de junio, una fecha inamovible que recuerda a Manuel Belgrano, creador de la bandera argentina y figura fundamental en la historia del país. Este día también dará lugar a un fin de semana largo, que se extenderá hasta el domingo 22 de junio.

La semana laboral entre estos feriados se reducirá a solo tres días hábiles, del martes 17 al jueves 19 de junio. Este esquema busca equilibrar el descanso de los trabajadores con el impulso al turismo y la economía local. Según fuentes oficiales, "estos fines de semana largos son una oportunidad para viajar y descansar".

Ambos feriados tienen un profundo significado histórico. Güemes, nacido en Salta en 1785, fue el primer gobernador de la provincia y lideró la resistencia contra las tropas realistas durante la independencia. Por su parte, Belgrano, fallecido en 1820, no solo creó la bandera nacional, sino que también fue un destacado economista y promotor de la educación y la justicia social.

El impacto de estos feriados se extiende más allá del descanso laboral. Se espera un aumento en la actividad turística, con miles de argentinos aprovechando la oportunidad para realizar escapadas y explorar distintos rincones del país. Sin embargo, también hay quienes critican la interrupción en la productividad laboral.

En conclusión, los feriados de junio de 2025 no solo honran a figuras históricas, sino que también ofrecen una pausa significativa en la rutina laboral, con implicaciones económicas y sociales. Este balance entre descanso y actividad económica refleja la importancia de estos días en el calendario nacional.