Hernán Imhoff, de 49 años, fue imputado y permanecerá en prisión preventiva tras ser acusado de asesinar a su ex pareja, Carol Mora, de 21 años, y a Martín Blanco, de 35, en un hecho que conmocionó a la ciudad de Reconquista. El doble crimen ocurrió el domingo 19 de octubre en la vivienda de Imhoff, ubicada en el barrio Center. Según la investigación, Imhoff disparó contra Mora y Blanco con un revólver calibre 38, provocando la muerte de ambos. El cuerpo de Mora fue trasladado en el baúl del auto del acusado y abandonado en una zona rural cercana a Avellaneda, mientras que el de Blanco fue hallado en el living de la casa.

La madre de Imhoff fue quien alertó a la policía tras recibir la confesión de su hijo en la madrugada del lunes. La rápida intervención policial permitió la detención del acusado cuando intentaba salir de su domicilio, portando el arma presuntamente utilizada en los homicidios. El fiscal Sebastián Galleano imputó a Imhoff por homicidio triplemente calificado en el caso de Mora (por vínculo, alevosía y violencia de género) y por homicidio agravado por el uso de arma de fuego en el caso de Blanco, además de portación ilegítima de arma de guerra.

Durante la audiencia realizada en los tribunales de Reconquista, el juez Gonzalo Basualdo dictó prisión preventiva sin plazo, argumentando el riesgo de fuga y la posibilidad de entorpecimiento de la investigación. El fiscal destacó la cantidad de pruebas recolectadas, incluyendo cámaras de seguridad, celulares y testimonios de testigos presentes en el lugar. Familiares de las víctimas reclamaron justicia, mientras que el acusado se mantuvo en silencio y expresó que "más adelante contará su verdad". El abogado defensor propuso alternativas a la prisión, como la utilización de tobillera electrónica, pero la solicitud fue rechazada.

El caso ha generado preocupación en la comunidad por el contexto de violencia de género y la reiteración de femicidios en la región. La investigación continúa bajo la órbita del Ministerio Público de la Acusación y la Policía de Investigaciones, con el domicilio del acusado bajo resguardo judicial y nuevas pruebas en proceso de análisis. El desenlace judicial será seguido de cerca por familiares y organizaciones que reclaman mayor protección y justicia para las víctimas de violencia de género.