En la ciudad de San Lorenzo, provincia de Santa Fe, un fallo judicial marcó un precedente en la lucha contra el incumplimiento de la cuota alimentaria. El juez de Familia, Marcelo Escola, dictó una resolución inédita contra un padre que se negaba a pagar la manutención de su hija, aplicando una serie de sanciones estrictas y creativas para obligarlo a cumplir con sus obligaciones legales.

Entre las medidas dispuestas por el magistrado se encuentran la suspensión inmediata de la línea de telefonía celular, el bloqueo de la cuenta bancaria, la suspensión de la licencia de conducir, la prohibición de salir del país y la inscripción en el registro de deudores alimentarios morosos. Sin embargo, la sanción que más llamó la atención fue la prohibición de participar y asistir a competencias de automovilismo regional, el hobby favorito del deudor.

El juez Escola explicó en diálogo con Radio 2 que la decisión apunta a afectar directamente los intereses personales del incumplidor: “Cuando tomamos contacto con sus actividades deportivas, vimos que corría en automovilismo regional y tenía un taller. Tomamos medidas a efectos de que le moleste y empiece a cumplir, que es lo que tenemos que lograr”.

La madre de la niña había denunciado al padre por no realizar los aportes convenidos, y el hombre ni siquiera se presentó al juicio. Ante esta situación, el magistrado consideró necesario buscar alternativas creativas para forzar el cumplimiento, señalando que “lo que está en juego es la vida de la hija y no el problema que él tiene con la progenitora. Tiene que pagar lo que debe y demostrar cómo va a seguir”.

El fallo fue comunicado a las [federaciones de automovilismo de Santa Fe](/entities/entity_1762904118475_47), Buenos Aires y Córdoba, para que el hombre quede inhabilitado tanto para participar como para asistir a las competencias. Escola reconoció que existen muchos casos similares y que la clave está en ser “lo más creativos posible” para que los padres incumplidores tomen conciencia. “Muchas veces son actividades propias, hobbies, entretenimiento, que los hace en desmedro de la calidad de vida de sus hijos”, afirmó.

El caso generó debate sobre la efectividad de este tipo de sanciones. El juez admitió que “relativamente, nunca las sanciones son ejemplificadoras, el incumplidor, es incumplidor, pero si no puede entrar al autódromo le puede molestar”. La resolución se suma a una tendencia judicial que busca impactar directamente en la vida cotidiana de los deudores alimentarios, ante la persistencia del problema en Argentina. El futuro de este tipo de medidas dependerá de su capacidad para lograr el objetivo principal: garantizar el bienestar de los niños afectados.