El acuerdo comercial entre Argentina y Estados Unidos está a punto de concretarse, según confirmaron fuentes oficiales y declaraciones del canciller Pablo Quirno durante la cumbre del Mercosur en Foz de Iguazú, Brasil. Quirno aseguró que el tratado está "prácticamente cerrado" y que solo restan detalles logísticos y la coordinación de agendas para la firma, que se espera sea realizada por los presidentes Javier Milei y Donald Trump.

El marco del acuerdo fue anunciado oficialmente en noviembre por la Casa Blanca, estableciendo compromisos en áreas clave como reducción de aranceles, acceso recíproco a mercados, propiedad intelectual y estándares regulatorios. "Lo que estamos esperando es una definición de agendas para la firma y para lograr una fecha de firma y terminar", explicó Quirno en diálogo con TN. El funcionario destacó que la agenda estadounidense está ocupada por negociaciones con más de cien países, lo que ha demorado la concreción del pacto.

El tratado contempla la apertura de mercados para productos argentinos como acero, aluminio, carne de res y recursos naturales, así como el acceso preferencial para exportaciones estadounidenses de medicamentos, maquinaria, tecnología y productos agropecuarios. Además, se prevé la adecuación de la legislación local para cumplir con los estándares acordados, especialmente en materia de propiedad intelectual y regulaciones sanitarias.

Fuentes del gobierno admiten que partes del acuerdo deberán ser remitidas al Congreso argentino para su aprobación, en particular aquellas vinculadas a tratados internacionales y cambios legales. "No hay ninguna duda de que hay partes que tienen que ir al Congreso porque sin la intervención del Congreso sería imposible instrumentarlas", señalaron fuentes oficiales.

La oposición, encabezada por el bloque Unión por la Patria, reclama ver la "letra chica" del pacto y exige que sea debatido en el Congreso antes de su implementación. Mientras tanto, el gobierno argentino mantiene una postura optimista y considera que el acuerdo traerá "muchísimos beneficios" para el país, impulsando la economía y fortaleciendo la cooperación bilateral.

El embajador argentino en Estados Unidos, Alejandro Oxenford, y funcionarios de la Secretaría de Producción y Desregulación han participado activamente en la redacción y adecuación normativa del texto final, que actualmente está en proceso de traducción y revisión legal. El acuerdo Mercosur-Unión Europea sigue pendiente, pero el gobierno argentino se muestra confiado en su pronta concreción.

El acuerdo comercial con Estados Unidos representa un paso significativo en la estrategia de apertura y modernización de la economía argentina, con expectativas de atraer inversiones y generar empleo. Las próximas semanas serán clave para la definición de la fecha de firma y el inicio de la etapa de implementación, que requerirá la colaboración de distintos sectores políticos y económicos.