La ciudad de La Banda, en Santiago del Estero, fue escenario de una tragedia que conmocionó a la comunidad. Diana Gómez Russo, una niña de 9 años, fue hallada sin vida en su domicilio del barrio Palermo. Su madre, María de los Ángeles Russo, fue detenida tras confesar ante la policía que le había suministrado varias pastillas de clonazepam la noche anterior.

El hallazgo se produjo en la madrugada, cuando los abuelos de la menor alertaron a las autoridades tras descubrir que la niña no respondía. Al llegar al lugar, los efectivos policiales encontraron a Diana recostada en su cama, sin signos de violencia externa. La madre, presente en la habitación, admitió con aparente serenidad haberle dado el medicamento, lo que orientó la investigación hacia una posible intoxicación.

La fiscal Natalia Saavedra, a cargo de la causa, ordenó la realización de la autopsia para determinar la causa exacta de la muerte. "La autopsia nos va a arrojar un resultado importante", señaló la funcionaria judicial, quien pidió cautela ante la gravedad del hecho y la sensibilidad de la situación. El informe toxicológico será determinante para establecer el grado de responsabilidad penal de la madre.

Según testimonios de vecinos y familiares, María Russo padecía problemas de salud mental desde hacía años y había sido internada en varias oportunidades en centros psiquiátricos, aunque solía abandonar los tratamientos ambulatorios. "Tenía episodios, pero nunca de violencia hacia su hija", relató una vecina. El entorno familiar confirmó que la relación entre madre e hija era cada vez más conflictiva, especialmente tras la separación de la pareja de Russo.

La noticia generó profundo dolor en la comunidad. La escuela a la que asistía Diana suspendió las clases y organizó una ceremonia en su memoria. "Era una niña alegre, siempre tenía una palabra amable para todos", expresó una docente. El Ministerio de Salud provincial confirmó los antecedentes psiquiátricos de la madre y especialistas consultados advirtieron sobre los riesgos de abandonar tratamientos en pacientes graves.

Mientras la investigación avanza, la madre permanece detenida y será sometida a pericias psiquiátricas para determinar si comprendía la criminalidad de sus actos. El caso expone la necesidad de mejorar el seguimiento de pacientes psiquiátricos y la protección de menores en situaciones de vulnerabilidad. La comunidad de La Banda sigue consternada, a la espera de respuestas y justicia.