Manuel Valverde Rodríguez, tío de Tony Janzen Valverde Victoriano, alias "Pequeño J", reapareció públicamente desde Perú para negar cualquier vínculo con el triple femicidio de Brenda del Castillo, Morena Verdi y Lara Gutiérrez, ocurrido en Florencio Varela en septiembre. Valverde, sobre quien pesan pedidos de captura nacional e internacional, aseguró en entrevistas televisivas que no se encontraba en Argentina el día de los asesinatos y que puede probarlo mediante registros migratorios y videos con fecha y hora.

"Entregarme es un trámite engorroso", afirmó Valverde, quien explicó que su entrega implicaría dejar de trabajar y separarse de su familia en Perú. El acusado sostuvo que su estadía en Argentina fue breve y exclusivamente para visitar a su sobrino, y que tras un viaje a Uruguay, no pudo reingresar al país y voló directamente a Lima, donde permanece desde entonces.

La investigación argentina se apoya en el testimonio de Celeste Magalí González Guerrero, imputada y acogida a la figura del arrepentido, quien ubicó a Valverde en la escena del crimen y lo describió como uno de los presentes con guantes de látex. Sin embargo, Valverde insiste en que no conoce a los otros implicados y que su relación con "Pequeño J" es únicamente familiar. También negó cualquier vínculo con el narcotráfico, tanto en Argentina como en Perú.

El caso, que conmocionó a la comunidad de Florencio Varela, está vinculado a disputas por narcotráfico y la participación de una presunta organización criminal. La Justicia argentina continúa con la investigación y evalúa solicitar la extradición de Valverde, mientras familiares de las víctimas exigen avances concretos y justicia. La causa presenta contradicciones en los testimonios y mantiene a varios sospechosos prófugos, lo que complica el esclarecimiento de los hechos y la determinación de responsabilidades.