La Boleta Única de Papel (BUP) debutará en las elecciones legislativas nacionales del 26 de octubre, marcando un cambio trascendental en el sistema electoral argentino. En la provincia de Buenos Aires, el principal distrito electoral del país, la implementación de este nuevo instrumento ha obligado a los partidos políticos a recalibrar sus campañas y estrategias de fiscalización.

La Cámara Nacional Electoral oficializó los modelos de boleta única para cada distrito, lo que permitirá a más de 36 millones de electores votar con un sistema que busca mayor transparencia y equidad. En Buenos Aires, serán 15 las listas que competirán por 35 bancas en la Cámara de Diputados, reflejando la diversidad de fuerzas políticas presentes en el territorio.

La campaña electoral ha virado hacia la explicación del nuevo mecanismo de votación. Referentes del peronismo, como el gobernador Axel Kicillof y la intendenta Mayra Mendoza, han utilizado conferencias y redes sociales para instruir a la ciudadanía sobre cómo marcar la opción elegida en la boleta. "La campaña se transformó en explicar cómo se vota y, además, decir que hay que votar a Fuerza Patria", señaló un dirigente del conurbano bonaerense. En el interior, intendentes justicialistas organizan muestras y charlas en los barrios para familiarizar a los vecinos con el sistema, que elimina el cuarto oscuro tradicional y lo reemplaza por un biombo donde se marca una cruz.

La fiscalización también se adapta a la nueva modalidad. Desde Pro y La Libertad Avanza, se destaca la menor complejidad para controlar el proceso, ya que desaparecen maniobras como el "voto cadena" y el faltante de boletas. "El control es cuando abrís la urna, que no te llegue la ‘urna embarazada’, y cuando cerrás, que se bajen bien las marcas al papel", explicó un referente macrista. La capacitación de fiscales y presidentes de mesa se ha vuelto central, con cursos y operativos en todo el territorio bonaerense.

El cambio de sistema ha generado críticas desde sectores del peronismo, que lo consideran una decisión política impulsada por el gobierno nacional. Sin embargo, la ciudadanía muestra interés y compromiso, como se evidenció en Dolores, donde el 73% participó en los comicios previos y ahora se prepara para el nuevo desafío.

La oficialización de las boletas únicas por parte de la Cámara Nacional Electoral representa un paso clave en el cronograma electoral, garantizando que cada votante reciba el mismo modelo en el biombo. El proceso de adaptación continúa, con partidos y autoridades enfocados en informar y capacitar para asegurar una elección transparente y participativa.